Roma - El líder del antisistema Movimiento Cinco Estrellas (M5S) y vicepresidente del Gobierno de Italia, Luigi Di Maio, hizo ayer un llamamiento a la unidad, tras las recientes divisiones protagonizadas con su socio, la ultraderechista Liga, en las negociaciones con Bruselas sobre los Presupuestos Generales para 2019. “Es el momento de estar unidos, de no ceder a las instrumentalizaciones y a las provocaciones de quien le gustaría ver naufragar todo por lo que hemos luchado y estamos a un paso de obtener. Confío en que quien está en el Gobierno quiere realizar lo que hemos firmado en el programa”, escribió Di Maio en el blog del M5S.
Las palabras del líder del M5S se producen después de que en los últimos días su formación haya vivido discrepancias con su socio, la Liga, que el ministro del Interior, Matteo Salvini.
Uno de los elementos que les divide es la propuesta del M5S de implantar lo que en Italia llaman la “ecotasa”, un impuesto a los vehículos que generen mayores emisiones, y dar incentivos a los ecológicos. “No habrá ningún impuesto para los nuevos coches. No está en el programa de Gobierno. Puedo decirlo en nombre del M5S y del mío, no habrá ninguna tasa sobre los coches”, advirtió ayer Salvini.
El ministro del Interior se refirió en estos términos a una iniciativa que ha sido rechazada por la patronal en el país, mientras que en los últimos días el vicesecretario de Transportes, Michele Dell’Orco (M5S), había subrayado que “favorecer la compra de automóviles ecológicos es imprescindible”. Además, recientemente también el subsecretario de la Presidencia de Gobierno italiano, Giancarlo Giorgetti, consideró fundamental detallar mecanismos para evitar que el subsidio para parados que defiende el M5S pueda fomentar la contratación en negro, un elemento que critica la oposición.
Negociación El Gobierno italiano está negociando con la Comisión Europea (CE) un presupuesto para el próximo año que cumpla las normativas comunitarias y que evite la apertura de un procedimiento sancionador, después de que el Ejecutivo comunitario haya rechazado en dos ocasiones el plan de Roma para 2019.
El Ejecutivo había previsto para 2019 un déficit del 2,4% del producto interior bruto (PIB), una cifra que acaba de rectificar al 2,04% tras las advertencias de Bruselas. Esta propuesta tiene que ser estudiada por la CE y el Gobierno italiano aún no ha explicado públicamente si este recorte afectará a la financiación de las promesas estrella la ayuda al desempleo y la reforma del sistema de pensiones. - Efe