Bruselas - Austria, país que ostenta la Presidencia rotatoria del Consejo, anunció ayer que sigue los pasos de Hungría y no firmará el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular. Los dos Estados miembros se quedan así aislados, junto a Estados Unidos, frente a los 190 países restantes que se prevé firmen el acuerdo los próximos 10 y 11 de diciembre en Marruecos.
Serán por tanto las capitales europeas las que suscriban el pacto de forma individual y no la UE en bloque por el desmarque de dos de sus países. “Lamentamos la decisión del Gobierno austriaco. Seguimos pensado que la inmigración es un desafío global que solo puede afrontarse con soluciones globales y una responsabilidad global (?) Continuaremos mejorando la gestión migratoria tanto dentro como fuera de la UE”, señaló Natasha Bertaud, portavoz de la Comisión Europea (CE), que ha recordado que durante la redacción del documento Viena había jugado un papel “constructivo, clave y activo”.
Del mismo modo que justificó Viktor Orbán, primer ministro húngaro, cuando en julio de desmarcó del acuerdo multilateral, la Austria de Sebastian Kurz alega que el documento parte de una premisa que considera la migración algo positivo. Una postura que contradice su línea política. “Hay algunos puntos que miramos de manera crítica y donde vemos una amenaza a nuestra soberanía nacional”, señaló en la radio pública ORF el canciller austriaco.
El país alpino ha defendido junto a Visegrado (Polonia, Hungría, Chequia y Eslovaquia) y ahora también Italia la línea más dura en materia migratoria de la Unión Europea. Desde el 1 de julio hasta el 1 de enero acoge la Presidencia del Consejo Europeo cuyo lema es “Una Europa que protege”. Durante estos meses las propuestas de Viena se han centrado en fortalecer el control fronterizo para “erradicar la inmigración ilegal” y eliminar las cuotas de reparto de refugiados obligatorias.
“La migración no es ni puede ser un derecho humano”, señaló con motivo del anuncio de retirada Heinz-Christian Strache, vicecanciller austriaco del ultraderechista Partido de la Libertad (FPÖ), que gobierna en coalición junto con los conservadores de Kurz. Austria es el único país del bloque comunitario con la extrema derecha en el Ejecutivo, pero Bruselas siempre ha evitado condenar este paso o advertirlo escudándose en “el compromiso europeo” del Gobierno.
Mensaje político El Pacto Global sobre Migración, que se cocina desde hace dos años, es el primer acuerdo intergubernamental que aborda la migración desde una perspectiva holística. Su fuerza radica más en el mensaje político que lanza, ya que para los países firmantes no es jurídicamente vinculante. El documento que países de todo el mundo ratificarán a finales de año en Marrakech recoge objetivos como mejorar la protección de los migrantes, combatir con más fuerza el tráfico de personas o evitar la separación de familias, como las políticas de Trump en EEUU.