Mamen Mendizábal se enfrenta hoy al estreno de Scoop con un programa muy relacionado con la actualidad. El Qatargate, un análisis de investigación sobre el porqué de la concesión de un Mundial de Fútbol a Qatar. Dinero, corrupción o mafia, ingredientes que se pondrán sobre la mesa esta noche en La Sexta.
Ha escogido como título ‘Scoop’?
-Por lo que significa en nuestro argot, exclusiva periodística, revelación de altura, exclusiva mundial? Está concebido para reivindicar el periodismo de investigación.
¿Cree que se ha perdido?
-No totalmente. Hay mucha gente que, afortunadamente, sigue investigando, lo hace en silencio, dedicando tiempo a sacar grandes historias.
¿En silencio?
-Mayoritariamente sí. Se trata de recopilar datos, hacer entrevistas, tener todos los elementos para que una noticia sea indiscutible, para que una revelación, cuando lleguen las demandas, sea incuestionable, que nada ni nadie pueda contra ella.
La opinión sobre el periodismo no es muy buena.
-Scoop servirá para demostrar que hay muchas formas de hacer periodismo. Nosotros, antes de sacar la noticia confirmamos al menos con tres fuentes, investigamos, nos documentamos y, además, tenemos que salvar muchísimas presiones.
Comienza con un programa de investigación que habla de fútbol.
-Ponemos el foco en la adjudicación del Mundial de Fútbol a Qatar. Es un país que no lo justifica por su tradición futbolística, ni siquiera tiene una temperatura aceptable para jugar al fútbol; a pesar de estas y otras razones se le dio el Mundial. Francia se lo tomó como una razón de Estado y hubo unas confederaciones y federaciones de fútbol dispuestas a aceptar dinero directamente de Qatar. Hubo una gran merienda para construir un nuevo país a través del fútbol.
Lo que está diciendo es una acusación de corrupción a la FIFA, ¿no?
-Sí. La FIFA durante muchos años ha vivido sin ningún control y con unas prácticas que se han demostrado como corruptas, se ha mostrado como una organización mafiosa y con una forma de funcionar muy cuestionada.
¿Está en proceso de reconversión?
-Eso dicen. Hemos entrevistado al expresidente del comité de ética de la FIFA y nos dice que el sistema de votación ha cambiado, que ya no eligen 19 personas, que lo hacen 200.
Sale más caro comprar voluntades e intenciones de voto. ¿Va por ahí?
-Exacto. Hace más difícil pagar porque hay que pagar a más personas. Cambia el método, se hace más caro, pero las prácticas son las mismas.
Coincide con el Mundial de Rusia.
Cierto y no es casualidad; este caso forma parte de una de las grandes historias del periodismo. Pero también hay otros muchos scoop que sacaremos gracias a periodistas que de una historia pequeña hicieron una historia enorme.
¿Por ejemplo?
-No te lo puedo contar. En el siguiente caso el foco estará puesto en España, es una revelación de tres periodistas españoles, era un tema pequeño y dio la vuelta al mundo. Scoop forma parte de los especiales de La Sexta y se emitirá en el momento en el que estén ocurriendo los hechos. El de Qatar se emite con la celebración del Mundial de Fútbol y el siguiente será en septiembre, habrá otro en noviembre y, probablemente, otro se emitirá en el mes de diciembre. Saldrán al calor de la actualidad.
La actualidad les va a dar los programas hechos.
-Vamos a susto por día. La actualidad está frenética, lo que aporta un formato como Scoop es que no olvidemos lo que está pasando, volver sobre asuntos que, quizá por ese ritmo trepidante del que hablas, tendemos a olvidar. Scoop nos permite encender de nuevo los focos. Tener memoria es importante, cuando la perdemos normalizamos comportamientos corruptos.
A su entender, ¿la corrupción es el principal problema que existe?
-Creo que sí. La corrupción hace que el pulso democrático se altere, que los concursos públicos dejen de tener transparencia, que la política vaya dopada, que el fútbol se organice de espaldas a los ciudadanos y mucha gente se lleve una parte del pastel; hay mucho ambicioso.
¿Es España más corrupto que otros países?
-Creo que se ha hecho un esfuerzo de transparencia judicial y periodística importante en los últimos años. Ha llegado un fin de ciclo?
¿Se va a acabar la corrupción?
-No iba a por ahí, pero espero que sí. Con lo de fin de ciclo me refería a que la crisis económica ha hecho que se cuestione todo el sistema.
El partido del anterior Gobierno español negaba cada caso de corrupción.
-Y al final ha salido del poder por los casos de corrupción?
Pero se ha mantenido años en el poder con la corrupción flotando a su alrededor.
-Una parte pueden negarla, pero el periodismo está para investigar la verdad que hay detrás y los tribunales para acreditar que esa corrupción existe. Eso pudo con el Gobierno anterior y es un aviso a navegantes.
La Justicia dicen que es igual para todos, pero Iñaki Urdangarin escoge cárcel y tiene un módulo para él, no convive con otros presos.
-La Justicia no es igual para todos, es algo que está claro. Pero que Urdangarín esté en la cárcel tiene que hacernos reflexionar sobre las críticas que hacemos al sistema judicial. ¿Hace diez años habríamos pensado que el marido de una Infanta, el cuñado del Rey, iba a estar en la cárcel? Eso era impensable. También tenemos que poner en valor que eso haya ocurrido.
El dinero por corrupción o intento de evasión fiscal también ha estado presente en el Gobierno de Sánchez. Màxim Huerta, un ministro que duró una semana.
-A mí lo que me sorprende es que un Gobierno que empieza con un listón altísimo como el de la corrupción, no hiciera unas preguntas básicas a los miembros que iban a formar parte de ese ejecutivo para ver si iban a estar capacitados para ese gobierno. A Màxim, los problemas fiscales no le invalidan nada más que para la función pública?
Ser ministro.
-La única medida lógica desde todos los puntos de vista era la dimisión.
¿Le ha impactado algo especialmente de todo lo sucedido en política en los últimos dos meses?
-Que haya prosperado una moción de censura y que un hombre como Pedro Sánchez al que muchos daban por muerto sea en este momento el presidente de un Gobierno. Ha sido un giro de guión para mí inesperado, para muchos también.
¿Puede hacer de pitonisa con el futuro del PP?
Ja, ja, ja? No. Es un fin de ciclo del Partido Popular y también se tiene que reinventar. Hace tiempo que no me atrevo a hacer predicciones, desde Trump creo que hemos dejado de mirar la bola de cristal. Lo veremos y lo contaremos. No voy a hacer apuestas; en 2018 fallaría todas.
Hablemos de justicia. ‘La manada’ está en la calle.
-En este caso, habrá que reflexionar sobre cómo la Justicia está perdiendo credibilidad. Habrá que articular un sistema donde sea sensible a la indignación social; no entiendo cómo hay tal diferencia de criterio en la prisión preventiva, no puede haber tantos criterios como jueces. La Justicia tiene un reto enorme por delante.