madrid. "Hacer cinco años de televisión es mucha mili", apuntaba el humorista Andreu Buenafuente, quien recurrirá a su dilatada experiencia en el directo para hacer un espectáculo "con colaboraciones sorprendentes y efectos especiales" en la gala de los XXIV Premios Goya, que conducirá mañana domingo. A la hora de tener un referente, siempre tiene en mente a Billy Crystal, "uno de los clásicos" en estas lides, aseguraba. "Cuando comencé a hacer mis primeros programas en directo ya pensaba en él", comentaba, al tiempo que asegura sentirse más identificado con el humor con cierta elegancia del actor estadounidense que con los números musicales con los que se prodigó Hugh Jackman el año pasado en los premios de Hollywood. No se imagina cantando y bailando como él y prefiere inspirarse en el sentido del humor con elegancia de Billy Crystal para convertirse por vez primera en el conductor de esta ceremonia.
Reclama para la cita "cierta tranquilidad" al espectador para asistir desde sus casas a un espectáculo "sin prisa pero con ritmo" que en esta ocasión podrá verse en directo y sin cortes publicitarios. Aunque "el factor sorpresa es primordial", Buenafuente avanza que en la gala del domingo se jugará con las nuevas tecnologías y habrá efectos especiales con colaboraciones sorprendentes en directo así como un vídeo grabado previamente, "que incluye 16 cameos" y que se emitirá en el mismo acto. "Cada uno ha de hacer lo que sabe hacer", respondía Buenafuente, consciente del papel que quiere desempeñar, como mero hilo conductor que conecte a los diferentes premiados. "No va a ser El show de Buenafuente para la Academia", aseveraba.
Tantos años de televisión le han dado aplomo y comodidad a la hora de recoger el testigo de otros ilustres presentadores de los Goya, como las actrices Rosa María Sardá, Antonia San Juan o Carmen Maura, su compañero José Corbacho o los integrantes de la compañía teatral Animalario, Alberto San Juan y Guillermo Toledo, en la polémica edición del "No a la guerra", de la edición del año 2003.
Para el humorista, aunque el cine es "una profesión que se trabaja día a día, es importante que tenga una puesta de largo, que saque pecho y, más que glamour, que es una palabra importada, demuestre elegancia y esplendor, que sus actores jueguen a ser una estrella por una noche, en el sentido bonito y no vanidoso del término" apuntaba.
El actor y director José Corbacho, compañero de Buenafuente en El Terrat, ya tiene experiencia como conductor de este tipo de premios. "Él es muy pudoroso, aunque no lo parezca, y se limita a sonreír cuando me ve por los pasillos", explicaba.