Con el final de la primavera a la vuelta de la esquina y después del mes de mayo que hemos pasado, sabemos que hay ganas de sol. Pero antes de salir corriendo a absorber vitamina D como si no hubiera un mañana, ten en cuenta que tu cuerpo necesita protección. Sigue estos consejos para que tu verano no se vea interrumpido por una quemadura solar.

Protección solar inicial

Utiliza siempre una crema con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30, independientemente del tipo de piel. Si eres fotosensible, emplea la máxima protección posible.

Aplicación correcta

Aplica la crema 20-30 minutos antes de exponerte al sol y reaplica cada 2-3 horas.

Horas de mayor riesgo

Evita la exposición solar entre las 11 y las 16 horas. Vigila que la radiación ultravioleta no sea demasiado elevada. Recuerda que, aunque no la veas, la radiación solar puede ocasionarte quemaduras al reflejarse en superficies u objetos e incluso al atravesar las nubes. Que esté nublado no quiere decir que el sol no queme.

Bronceado progresivo

Comienza con exposiciones cortas de 15 minutos el primer día y aumenta gradualmente en 10 minutos diarios. Si hay síntomas de quemadura solar, evita tomar el sol durante los días necesarios.

Cuidados adicionales

Evita colonias y desodorantes durante la exposición al sol. Tras tomar el sol, dúchate e hidrata tu piel. Las colonias y desodorantes tampoco sirven para enfriar la piel en caso de quemadura.

Un hombre toma el sol con su perro Cedida

Accesorios protectores

Usa sombrero, ropa adecuada y gafas de sol para proteger tus ojos y piel.

Mayor altitud, mayor protección

En la montaña, utiliza cremas con mayor fotoprotección, ya que el riesgo de quemaduras aumenta con la altitud.

Áreas sensibles

Aplica cremas con mayor FPS en zonas sensibles como cara, párpados, labios, manos y nariz. Si es necesario usa un protector total.

Crema resistente al agua

Usa cremas resistentes al agua para proteger tu piel durante y después del baño. Según la Asociación Española de Dermatología, permiten hasta cuatro baños de 20 minutos sin verse su capacidad protectora alterada

Grupos de riesgo

Especial cuidado con niños, personas mayores y personas con condiciones como vitíligo, herpes, albinismo y acné. Los niños menores de 2 años no deben exponerse al sol.

Consulta dermatológica

Visita al dermatólogo ante cualquier cambio en la piel, como alteraciones en color, tamaño, sangrado, picor o dolor.

Varices y embarazo

El sol puede agravar las varices y las embarazadas son más propensas a manchas cutáneas.

Medicamentos fotosensibles

Consulta a tu médico si estás tomando algún medicamento que pueda aumentar la sensibilidad al sol.

Evita las cabinas de rayos UVA

Evita el uso de camas de bronceado cosmético. La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), dependiente de la OMS, las considera carcinógenas.

Consejos para tomar el sol este verano Zuriñe Grisela - DNA