Una asociación es una entidad legal conformada por diferentes personas u organizaciones que se juntan por un fin común. Goza de personalidad jurídica y no puede tener finalidad lucrativa, aunque puede realizar una actividad económica (los beneficios obtenidos con dicha actividad deberán reinvertirse en el cumplimiento de los fines de la entidad).
Los propósitos de una asociación pueden ser muy diversos. Algunas simplemente aspiran a agrupar a personas y organizaciones con intereses comunes, de modo que puedan compartir esfuerzos de cara al resto de la sociedad, mientras que otras buscan ejercer determinados cambios y servir de punto partida para las personas que se identifican con las mismas aspiraciones: deportivas, cívicas, ecológicas, profesionales y gremiales, entre muchas otras. Sea como sea, todas las asociaciones tienen varias características en común: tienen un funcionamiento democrático y desarrollan su actividad de forma estable, implicando a un número ilimitado de asociados (y siempre que tengan en el momento de creación tres o más personas físicas o jurídicas). Todas ellas, tengan el fin que tengan, deben estar inscritas en un registro público y funcionar conforme a lo que establece la Ley Reguladora del Derecho de Asociación.
En el País Vasco estas agrupaciones se encuentran reguladas en la Ley 7/2007, de 22 de Junio que, en lo que respecta al régimen de inscripción, establece que las asociaciones deberán inscribirse en el Registro General de Asociaciones del País Vasco.
Radiografía alavesa
Atendiendo a todas estos condicionantes, revisamos el Registro de Asociaciones de Euskadi y comprobamos que en la provincia están inscritas a día de hoy 4.292 asociaciones, mientras que en Bizkaia hay 13.521 y el Gipuzkoa 8.224. Todos los municipios alaveses (51) tienen inscrita alguna asociación, aunque es la capital la que cuenta con mayor número de ellas, un total de 2861, el 70% del total. Llodio es el segundo municipio con más agrupaciones (215), seguido de Amurrio (181). En el resto del territorio no se llega al centenar: Agurain cuenta con 88, Iruña de Oca y Legutio 44, Laguardia 43, Ayala 42, Labastida 41 y Zigoitia 40. En el lado contrario están Berantevilla y Navaridas, que solo tienen una asociación cada uno: La Asociación cultural, recreativa y deportiva Aran Eder y Asociación cultural y turística El Cerrillo, respectivamente. Kripán con dos, Samaniego con 3 y Moreda de Álava con 4, completan la parte baja del ranking.
Atendiendo a las categorías, las asociaciones de carácter cultural representan el mayor porcentaje con el 60% del total. Destinadas a la promoción de la música, danza y folklore, deporte, gastronomía o teatro, entre otras, son un elemento de participación y expresión que facilita la integración de la ciudadanía en la sociedad.
Otras de las asociaciones con gran presencia son las socioeconómicas, es decir, aquellas destinadas a promover, difundir, gestionar y potenciar acciones a favor de diferentes colectivos. En Álava son más de 900. Además, hay registradas más de 350 entidades benéficas asistenciales, que tienen como principal fin es prestar ayuda a ciertos grupos (sociales, étnicos, culturales, religiosos o geográficos desfavorecidos por algún tipo de contexto, lógica, dinámica, enfrentamiento o guerra).
Asociaciones de estudiantes, de antiguos estudiantes y de padres y madres, por ejemplo, que se unen para lograr unos fines educativos e integrarse más activamente en la comunidad escolar son más de 200 en los distintos municipios alaveses. Las vecinales, que tienen como objetivo mejorar las condiciones de vida de la comunidad, afrontando sus problemas y velando por sus intereses también tienen su espacio y hay alrededor de 180 y también existen 52 agrupaciones de tiempo libre para jóvenes repartidas por toda la geografía alavesa. Las asociaciones en defensa y conservación del patrimonio cultural e histórico también tienen presencia en la provincia, así como aquellas que buscan promover políticas que favorezcan al desarrollo, la difusión y potenciar acciones a favor del mundo rural. Entre ellas se destacan las asociaciones de mujeres que impulsar la igualdad y progreso dentro de éste.
En la capital para toda la provincia
La singularidad de Álava hace que la concentración de servicios y personas en Vitoria-Gasteiz sea una de sus características. Sin embargo, en el ámbito de las asociaciones es muy habitual que haya agrupaciones que tiene su sede en la capital, pero presten sus servicios en toda la provincia. Esta circunstancia se da ampliamente en organizaciones del llamado Tercer Sector, que son aquellas que canalizan la solidaridad organizada y la participación social de la ciudadanía en general y, en particular, de personas, familias, grupos o comunidades afectadas por una situación, problema o necesidad de carácter social.
Un ejemplo de esta forma de actuación la encontramos, por ejemplo, en Asafes, la Asociación Alavesa de Familiares y Personas con Enfermedad Mental. En la actualidad la componen 607 familias asociadas, 35 trabajadores/as, 5 personas contratadas indirectamente, 87 voluntarios/as y atiende alrededor de 2.000 personas al año y a más de 800 alumnos/as mediante charlas de sensibilización en centros educativos. Tienen servicios para familiares, para personas usuarias y programas de prevención y sensibilización y muchos de ellos se extienden a la zona rural: servicios de acogida, programas de Intervención socio-comunitaria, grupos de autoayuda, Escuela de familiares y personas usuarias, equipo de apoyo psicoeducativo a domicilio, programa de vacaciones y el programa de prevención en salud mental en centros educativos. Además, la población alavesa con necesidades en este ámbito que vive fuera de Vitoria-Gasteiz puede hacer uso de los servicios que se ofertan en la capital.
