El consejero de Salud del Gobierno vasco, Alberto Martínez, ha calificado de "acuerdo histórico de país" que se haya cerrado la tercera fase del Pacto de Salud con la aprobación de los 24 documentos propuestos, más de la mitad "prácticamente por unanimidad".

La Mesa de Salud se reúne desde las diez de la mañana en Bilbao, en la jornada de la tercera fase de los trabajos, la de las líneas estratégicas, tras una primera fase de diagnóstico y una segunda de principios y valores.

A lo largo de la jornada, se ha procedido a la votación de los 24 documentos de líneas estratégicas en distintas materias, que han salido adelante y, en algún caso, con cambios como en lo relativo a la política lingüística o el documento sobre colaboración público-privada.

Al término de las votaciones, el consejero ha señalado que el trabajo de los últimos diez meses ha obtenido "un resultado relevante" y se ha acordado y cerrado tercera fase del Pacto de Salud.

Según ha precisado, los 24 documentos trabajados en los grupos de expertos en la mesa del pacto han prosperado en su totalidad. Martínez ha indicado que más del 50% de los documentos de las líneas estratégicas ha sido "aprobados prácticamente por unanimidad" y todo ellos por "un amplísimo consenso".

"Ningún documento ha estado en riesgo de no prosperar. Podemos concluir que el apoyo a esta tercera fase es realmente sólido y contundente", ha manifestado.

Participantes

Martínez ha mostrado su ilusión, en primer lugar, por los pacientes, y ha señalado que las asociaciones "se han volcado y han hablado alto y claro". "Necesitaban estos acuerdos y estos compromisos, ahora nos toca responderles y acompañarles", ha añadido.

También ha indicado que se alegra por los profesionales porque, además de haberse "implicado han sabido conectar en cuestiones médicas y sanitarias con perfiles alejados de su profesión". "La escucha y la empatía ha sido mutua y el conocimiento de los profesionales ha servido de guía en los documentos y contenidos con un perfil más sanitario", ha agregado.

Asimismo, el consejero ha señalado que los sindicatos y los partidos políticos también han tenido también un "papel clave" en todo el proceso y ha destacado que internamente "su trabajo también ha sido encomiable".

El consejero de Salud también ha citado a las universidades, empresas y Confebask que, en algunas ocasiones han podido tener un papel más periférico, pero "siempre reflexivo, constructivo, activo, respetuoso y aportando".

"Nos hemos escuchado, hemos debatido, hemos contrastado, hemos discutido y también hemos acordado, sobre todo, hemos aprendido todos sin excepción, y ese es un logro en sí mismo que tenemos que revertir en la sociedad", ha apuntado.

"Acuerdo histórico" para Euskadi y Osakidetza

Alberto Martínez ha apuntado que ese acuerdo plenario en los 24 documentos se lo debían a la sociedad vasca. A su juicio, es un "acuerdo histórico para Euskadi, un acuerdo histórico para Osakidetza, para los profesionales y, sobre todo, para pacientes". "Pacientes que pueden ser de una ideología o de otra, pacientes de ámbito sindical, pacientes que trabajan en empresas... en definitiva, pacientes", ha agregado. Por lo tanto, ha indicado que ahora "toca seguir trabajando"    .

Cuestionado sobre los cambios en el texto relativo a política lingüística, ha aclarado, en primer lugar, que cada uno de los documentos ha recibido distintas enmiendas, algunos hasta 100. La Mesa ha votado las enmiendas y, en el caso de la política lingüística, ha señalado que el texto ha tenido un "alto consenso", con 18 votos a favor, tres abstenciones y cinco votos en contra y ha generado diferencias, por ser "excesivo para algunos y corto para otros".

En relación al documento público-privado, ha manifestado que el voto de Confebask, que lo ha apoyado, ha sido "crítico" al considerar que se era "exigente" y ha apuntado que, en la misma línea, se ha expresado el PP, mientras que otros grupos han expresado "lo contrario". En todo caso, ha señalado que el consenso ha sido generalizado en todos los documentos "y también en estos".