La pornografía ha crecido exponencialmente, especialmente en la red. El acceso a internet y la disponibilidad del teléfono móvil a edades tempranas ha revolucionado la manera en la que los adolescentes aprenden sobre sexualidad, haciendo que el consumo de porno online se convierta en una práctica de lo más habitual. En Euskadi, la edad media de acceso al porno ha descendido a los 12 años y tres de cada cuatro adolescentes confiesan que toman como referente el cine de adultos para sus propias relaciones sexuales. El consumo de porno no constituiría en sí mismo algo problemático si las producciones pornográficas mainstream no fuesen un exponente claro de cosificación de las mujeres, misoginia, estereotipos de género y violencia sexual. Nueve de cada diez escenas porno contienen agresiones físicas o verbales.

¿Qué pensarían si un Nacho Vidal con label vasco les confesase abiertamente que lleva dos meses enseñando a su hijo todas las técnicas sexuales de dominación y a su hija cómo someterse? Este vídeo es precisamente uno de los elementos que se incluyen en la campaña única que este año han firmado las instituciones vascas de cara al 25-N, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. Bajo el lema “El porno es una escuela de violencia contra las mujeres”, esta acción de concienciación pretende advertir a la sociedad del peligro de dejar la educación afectivo sexual de la juventud en manos de la pornografía. Se difundirá entre el 10 y el 25 de noviembre a través de televisión, radios, medios off line y online, exteriores y redes sociales.

La campaña ha sido presesentada por la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Nerea Melgosa; la directora de Emakunde, Miren Elgarresta; la directora de Igualdad de la Diputación de Gipuzkoa, Nerea Isasi; la diputada de Igualdad, Euskera y Gobernanza de Araba, Jone Berriozabal; la directora de Igualdad de la Diputación de Bizkaia, Patricia Campelo; y la presidenta de Eudel, Esther Apraiz. Melgosa destacó la importancia de que todas las instituciones hayan trabajado coordinadamente para lanzar a la sociedad “un único mensaje, mostrando una imagen de compromiso de país por una sociedad libre de violencia contra las mujeres”.

El PROBLEMA ES LA VIOLENCIA

La consejera advirtió, asimismo, de que la omnipresencia de internet ha provocado que la pornografía “se haya expandido masivamente en nuestra sociedad de una manera que no tiene precedentes”, con una oferta inmensa, gratis y de 24 horas. En sus palabras, “el problema no es el acceso al sexo, sino a la violencia, porque el porno que están consumiendo mayoritariamente es violento contra las mujeres”. Así, la pornografía se está convirtiendo “en una escuela de violencia, una especie de libro de instrucciones sobre lo que deben hacer en sus relaciones”. De hecho, dijo, la industria del cine para adultos “está construyendo un imaginario erótico colectivo en el que hay una normalización de las actitudes violentas contra las mujeres”.

Por su parte, la directora de Emakunde, Miren Elgarresta señaló que “no podemos permitir que la violencia, la humillación, la dominación de las mujeres se convierta en algo erótico y en algo natural; ni que el sexo se confunda con la violencia; ni que nadie se vea obligado u obligada, sobre todo obligada, a hacer cosas que no quiere en sus prácticas sexuales”. A juicio de Elgarresta, la juventud “tiene derecho a una educación sexual de calidad”. Ha recordado, asimismo, que, entre otras acciones, Emakunde está llevando a cabo un trabajo con personas expertas en educación afectivo-sexual dentro del programa Jakitun, que “nos advierten de que la pornografía que se consume mayoritariamente, además de estar cargada de violencia, también lo está “de estereotipos y prejuicios racistas y sexistas”.

AYUNTAMIENTOS Y DIPUTACIONES

La presidenta de EUDEL, Esther Apraiz, explicó que la Declaración del 25N para los ayuntamientos vascos está alineada con la campaña. Desde EUDEL, dijo, se proponen activar todos los mecanismos “para garantizar que las mujeres puedan expresar sus deseos, afectos y comportamientos sexuales sin coacciones ni violencias, al margen de los estereotipos y mandatos de género”. Por su parte, Jone Berriozabal, diputada foral de Igualdad, Euskera y Gobernanza de la Diputación de Araba, defendió que la pornografía que se consume de forma mayoritaria “reproduce, refleja y promueve los roles y arquetipos más violentos”, por lo que “no puede educar a las y los más jóvenes”. En este sentido, mostró el compromiso de la institución foral de “seguir apoyando a las familias” para que, junto con los centros educativos, “afronten la educación afectivo-sexual de una forma eficaz”.

Desde la Diputación de Gipuzkoa, la directora de Igualdad, Nerea Isasi, destacó la necesidad de poner de relieve “los nuevos ámbitos en los que se da la violencia machista, en especial en el entorno digital, que perpetúa y extiende a nuevos entornos situaciones de sometimiento, dando lugar a nuevas dinámicas de violencia machista”. Así, mostró su compromiso con “una educación sexual y afectiva basada en la libertad y la igualdad”.

Finalmente, la directora de Igualdad de la Diputación de Bizkaia, Patricia Campelo, añadió que “si bien es cierto que notamos el efecto de las políticas públicas, de las campañas de sensibilización, de la incidencia de la sociedad civil, de la reivindicación feminista, no es menos cierto que los datos crecen, que el machismo se rearma, que la violencia adquiere incluso formas nuevas que en este 25N tenemos que recordar”.