El juez que investiga a Luis Rubiales por delitos de agresión sexual y coacciones a la jugadora Jenni Hermoso interroga este jueves a dos antiguos miembros de su equipo al frente de la RFEF: el exdirector de Integridad Miguel García Caba y la jefa de prensa de la selección femenina, Patricia Pérez.

Ambos declararán como testigos ante el magistrado de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge, que este mismo miércoles acordó imputar al exseleccionador Jorge Vilda, al director de la selección, Albert Luque, y al de Marketing de la Federación Española de Fútbol, Rubén Rivera, por presuntas coacciones a Jenni Hermoso y a su entorno.

Los dos últimos estaban citados en calidad de testigos, si bien el juez cambió su condición a investigados tras oír esta semana al hermano y a una amiga de Jenni Hermoso, que confirmaron las presiones recibidas para justificar públicamente el beso en la boca que Rubiales dio a la futbolista tras la victoria de la Selección en el Mundial, el pasado 20 de agosto.

Estos tres nuevos imputados declararán en la Audiencia Nacional el próximo 10 de octubre, una semana después de que el juez oiga la versión de tres compañeras de Jenni Hermoso en la Selección, Alexia Putellas, Misa Rodríguez e Irene Paredes, citadas como testigos el próximo lunes.

Pero este jueves será el turno del exdirector de Integridad de la RFEF Miguel García Caba, cesado el pasado viernes; y de la jefa de prensa de la selección femenina, Patricia Pérez, que serán interrogados sobre esas presiones y previsiblemente sobre las declaraciones que facilitó la RFEF y que atribuyó a la futbolista tras la victoria del Mundial restando importancia a lo ocurrido.

Presiones a Hermoso

La futbolista, en un duro comunicado emitido cinco días después del episodio, además de reiterar que el beso no fue consentido, confesó que se sintió "vulnerable y víctima de una agresión", y denunció que estuvo "bajo una continua presión para salir al paso con alguna declaración que pudieran justificar el acto del Sr. Luis Rubiales" y que ni él ni la RFEF la respetaron tras la polémica.

"Se me pidió realizar una declaración conjunta para rebajar la presión sobre el presidente (...)", indicó la internacional, que respondió en ese momento que "no haría ningún tipo de declaración individual o conjunta sobre este asunto".

También la Fiscalía considera que Jenni Hermoso, jugadora del Pachuca en Mexico, se vio envuelta en una "situación de hostigamiento", según relató en la querella que interpuso contra Rubiales por agresión sexual y coacciones y que ha derivado en la apertura de una causa en la Audiencia Nacional.

El procedimiento, por el momento, acumula ya cuatro investigados y el juez ha autorizado recientemente la personación como acusación popular de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) con el visto bueno de la Fiscalía, que apoyó su petición por ser sindicato representativo y parte afectada.