El Departamento de Salud y Osakidetza han difundido una serie de recomendaciones ante la subida de temperaturas para prevenir los efectos del calor que incluye consejos como beber agua sin tener sed, protegerse del sol y evitar esfuerzos físicos que generen un intensos sudor.

Estas recomendaciones son especialmente relevantes en el caso de las personas que pertenecen a grupos de riesgo como enfermos crónicos, niños y mayores, según ha recordado en un comunicado el Departamento de Salud.

Beber mucho agua

No es conveniente tomar bebidas con cafeína, alcohol o demasiado azúcar porque no calman la sed y le hacen perder más líquidos corporales, como tampoco lo es hacer comidas grasas y demasiado abundantes puesto que dificultan la adaptación al calor.

Sí es recomendable en cambio aumentar el consumo de ensaladas, verduras y frutas, ya que contribuirán a reponer las sales minerales que se pierden por el sudor.

Evitar horas centrales del día

En casa se deben cerrar las ventanas y bajar las persianas sobre las que dé el sol, aprovechar los momentos de menos calor para ventilar y refrescar la casa y usar en ventilador si se dispone de él. Si aún así se sigue notando mucho calor, es conveniente refrescarse el cuerpo con agua, sobre todo cara y manos.

En la calle hay que evitar estar al sol en las horas centrales del día, usar sombrero, gafas de sol y protector solar, no hacer grandes esfuerzos físicos y si no hay más remedio que trabajar a pleno sol, es fundamental cubrirse la cabeza y llevar ropa ligera muy transpirable, así como beber de 2 a 4 vasos de agua fresca por hora.

Colectivos vulnerables

Se deben extremar las medidas de precaución con las personas más frágiles como bebés, personas mayores y personas enfermas y nunca debe quedarse alguien en un vehículo estacionado y cerrado, aunque esté a la sombra.

Las personas ancianas, sobre todo las que viven solas o son dependientes, pueden tener dificultades en adoptar medidas protectoras, por lo que es conveniente visitarlas, al menos, una vez al día.

Insolación

En el caso de insolación (piel enrojecida, caliente y seca, pulso rápido, dolor intenso de cabeza), hay que mantener a la persona en un sitio fresco, cubrir su cabeza y axilas con compresas mojadas y frías, y darle a beber agua con sal y bicarbonato. Si está inconsciente y vomita, se le debe ladear la cabeza y mantenerle libres las vías aéreas, y llamar al 112.