La Audiencia Nacional ha aplazado hasta el próximo mes de septiembre el juicio a once acusados de participar en una trama de venta de carne de caballo en mal estado -algunas piezas incluso con restos de melanoma- al renunciar uno de ellos a su abogado y no tener designado otro que le sustituya.

El juicio, en el que se esperaban conformidades de algunos acusados con la Fiscalía, ha comenzado con algo de retraso y ha acabado suspendiéndose tras anunciar uno de los acusados, un "entrador" de ganado en los mataderos, que había decidido renunciar a su abogado del turno de oficio.

La presidenta del tribunal le ha comunicado que tiene tres días para designar un nuevo abogado y ha suspendido la sesión, tras anunciar que el juicio no podrá reanudarse hasta el 12 de septiembre.

Carne en mal estado

La Fiscalía atribuye a los once acusados delitos como falsedad documental, contra la salud pública o grupo criminal, y solicita condenas de entre cuatro y nueve años y medio de prisión, que podrán verse rebajadas si se concretan los acuerdos de conformidad que se esperaban.

Según su escrito de conclusiones provisionales, los acusados habrían participado entre 2016 y 2017 en la introducción de carne de caballo no apta para consumo humano en el mercado, evitando su trazabilidad y control sanitario. La base de operaciones se encontraba en dos mataderos de las localidades leonesas de Astorga y Toreno.

Pasaporte rojo

La carne procedía de caballos de los que no se disponía documentación o que evidenciaba que ésta no era apta para el consumo humano, es decir, que tenían lo que se denomina en el sector "pasaporte rojo". Este certificado se "blanqueaba" con el de otros animales, algunos incluso muertos.

Otros ejemplares directamente se sacrificaban y "entraban en la cadena alimentaria humana" sin ser válidos para ello, según la Fiscalía.

Para lograrlo "era indispensable" el acuerdo entre "los entradores" de ganado en los mataderos, los responsables de los mismos y el veterinario oficial.

Signos de melanoma y listeria

La Fiscalía menciona, por ejemplo, lo ocurrido en marzo de 2017, cuando se sacrificaron cuatro equinos en Toreno con "claros signos de melanomas" que luego se vendían a 1,50 euros el kilo, aunque se tuvo que quitar la carne que tenía "signos evidentes de melanoma, dejando sólo un 20 %" de aquella donde "no eran visibles los nódulos" de color negro.

Destaca asimismo que en las muestras investigadas se hallaron sustancias que causan efectos nocivos para la salud, como "daños genéticos" o "favorecen probablemente la aparición de distintas formas de cáncer", y en algunos casos llegaron a dar positivo en listeria.

Trama criminal

Entre los acusados se encuentran tres "entradores" de ganado en los mataderos, que se enfrentan a las mayores peticiones de pena (entre seis y nueve años y medio), mientras que para quien ejercía como veterinario oficial de Castilla y León en el matadero de Toreno solicita 8 años y medio.

También están acusados los responsables de controlar la adquisición de ganado y los tres supuestos encargados de la distribución, entre ellos Johannes Fasen, que fue condenado en Francia por la mayor estafa alimentaria de Europa, el caso Horsegate, un escándalo que saltó en Reino Unido en 2013 y que destapó la comercialización de carne de caballo haciéndola pasar por ternera.