El Departamento de Salud ha incidido en la importancia de mantener actualizada la situación vacunal, también en la edad adulta, ya que la vacunación no acaba en la edad pediátrica y debe prolongarse a lo largo de la vida, debido a la emergencia o reemergencia de enfermedades y a la necesidad de refuerzo inmunológico.

En un comunicado, Salud ha hecho este recordatorio después de que este mismo mes haya aprobado la actualización para 2023 del calendario vacunal a lo largo de toda la vida, en línea con las recomendaciones del Consejo Asesor de Vacunas de Euskadi.

El Departamento que dirige Gotzone Sagardui ha subrayado la importancia de que también las personas adultas "revisen y mantengan actualizada su situación vacunal", porque "es su derecho acogerse a las pautas señaladas precisamente en el calendario específico para esa franja de población".

Al mismo tiempo, ha remitido una circular al conjunto de profesionales de Osakidetza, colegios profesionales sanitarios y red de centros sanitarios privados de Euskadi, en la que recuerda que la vacunación es una actividad preventiva que debe incorporarse en la actividad diaria de la consulta de población adulta.

Asimismo, el Departamento incide en la conveniencia de aprovechar el contacto con los servicios sanitarios -incluyendo los de prevención de riesgos laborales- y las campañas específicas (gripe, covid), para comprobar que "el estado inmunitario de la persona es adecuado, especialmente en el caso de enfermedades en proceso de eliminación, como el sarampión, la rubéola congénita o la poliomielitis".

Además de la población adulta sana, el calendario de vacunación a lo largo de toda la vida recientemente actualizado incluye como novedad la vacuna frente al herpes zóster en personas que cumplan 65 años a lo largo de este año, que se suma a las ya recomendadas a partir de esa edad (gripe y neumococo).