La tormenta desatada por la escalada de precios y agravada por la guerra en Ucrania no ha calado de momento en el mercado laboral vasco, que puede marcar este mes un nuevo récord de afiliación y que en el primer trimestre del año ha situado su tasa de paro en el 9,1%, ocho décimas menos que a finales de 2021.

Los datos de la encuesta de Población en Relación a la Actividad (PRA) hechos públicos ayer por Eustat constatan el buen momento de la economía vasca. La tasa de desempleo de Euskadi vuelve a bajar tras el repunte registrado en el último trimestre del año pasado y se sitúa muy cerca de la referencia del 8,8%, alcanzada entre julio y septiembre de 2021, que marca la frontera de la recuperación en términos de empleo del ciclo del covid.

Un total de 8.300 personas abandonaron las listas de Lanbide entre enero y marzo de este año. Y aunque noes habitual que coincidan ambos datos, también se crearon 8.300 puestos de trabajo. De modo, que la economía vasca ha generado 92 empleos al día en el arranque de 2022. El ritmo actual duplica el que se registraba en los años de expansión previos a la pandemia.

Ralentización

Es cierto que había mucho terreno que recuperar, pero con el acelerón del primer trimestre Euskadi supera ya el número de ocupados previos al covid. Según los datos de Eustat, un total de 953.800 vascos están en estos momentos dentro del mercado laboral, son 2.600 más que en el último trimestre de 2019, justo antes del covid.

Las crisis nunca son bien recibidas, pero siempre es mejor que lleguen en una fase expansiva y que solo frenen el crecimiento en lugar de arrastrar a números rojos la economía. Ese es el contexto actual. Las expectativas de las empresas son elevadas y necesitan personal para alcanzar objetivos.

Hasta marzo no han levantado el pie del pedal de la contratación, la duda es que ocurrirá a partir de ahora en un escenario en el que continúan las tensiones de precios y materias primas, mientras la guerra a las puertas de Europa condiciona gran parte de la actividad productiva.

A la espera de lo que ocurra en los próximos meses, la encuesta de la PRA de Eustat refleja que en estos momentos hay 95.200 vascos sin empleo. La mayoría son mujeres (48.700) y por ello tienen una tasa de desempleo más elevada, en concreto el 9,7%, frente al 8,5% de los hombres. El tradicional desajuste entre ambos géneros se ha agudizado en el arranque de este ejercicio, ya que el paro entre ellos ha bajado un 9,5% y el de ellas solo un 6,5%.

En cuanto a la formación, la menor tasa de paro (5,2%) se registra entre las personas con estudios superiores, tras un descenso del 1,5%. Los que tienen estudios primarios (12,8%) o secundarios y medios (11,1%) tienen más dificultades para encontrar empleo.

Diferencias por territorios

Las diferencias también son notables por territorios históricos. En Bizkaia las personas desempleadas disminuyen en 7.000 y la tasa de paro baja 1,3 puntos hasta el 10%. En Gipuzkoa, que cuenta con 24.000 desempleados, desciende el paro en 2.400 y la tasa de paro en 0,7 puntos porcentuales, hasta el 7%, mientras que en Araba el número de parados crece en 1.100 y la tasa alcanza el 10,4% (+0,8). En las capitales, el paro disminuye en Bilbao en 6.200 personas, en Donostia en 400, mientras que en Gasteiz aumenta en 1.400.

En cuanto a la nacionalidad, la tasa de ocupación más elevada se da entre las personas de nacionalidad española con un 70,8% y un aumento de seis décimas porcentuales respecto al trimestre anterior, mientras que entre las personas con nacionalidad extranjera se sitúa en el 54,5%, con un repunte de un punto porcentual. En este capítulo, cabe resaltar que Euskadi alcanzó en marzo su récord de afiliación de extranjeros, con casi 76.000 cotizantes foráneos.