- El lehendakari Iñigo Urkullu participó ayer en Donostia en la inauguración del primer centro educativo transfronterizo de Euskadi, Larrun école basco-française, un centro con un modelo de inmersión en euskera y francés y que acoge a 75 alumnos de educación infantil.
Ubicado en las instalaciones del colegio El Carmelo, Larrun contará en el próximo curso con todos los niveles de Educación Infantil (2-5 años) y en el siguiente abrirá ya el primer nivel de Primaria.
Urkullu indicó que la pandemia ha puesto de manifiesto “la relevancia adicional que tiene la educación en la vida familiar, laboral y social”. El lehendakari subrayó “la importancia de mantener la educación presencial” y trasladó su reconocimiento a la labor de la comunidad educativa, que hace posible que “las aulas sean lugares seguros”.
“Una labor y un compromiso que están permitiendo atender la formación de las niñas y niños, facilitar la vida de las familias y también nuestra convivencia en sociedad”, remarcó el lehendakari.
El acto de inauguración contó también con la asistencia del presidente de la Región Nueva Aquitania, Alain Rousset, el consejero de Educación del Gobierno Vasco, Jokin Bildarratz, el alcalde de Donostia, Eneko Goia, la directora de la Eurorregión Nueva Aquitania Euskadi Navarra, Arola Urdangarin, y el presidente de la asociación Échanges Pays Basque, Pierre Olhagaray, entre otras autoridades. De la mano del equipo directivo, las autoridades de ambos lados del Bidasoa conocieron de primera mano tanto el proyecto educativo como las instalaciones del centro escolar.
Urkullu subrayó que tanto Nueva Aquitania como Euskadi comparten “un mismo espíritu y unos ideales en el proyecto de Eurorregión”, que pasan por “la apuesta por la formación de la juventud en un marco abierto, multicultural y multilingüe” y que participan de un mismo proyecto “europeo y europeísta”.
En este sentido, destacó que el proyecto educativo de Larrun responde a “esta misma visión”, ya que es una iniciativa “pionera e innovadora”, que “desarrolla un proyecto pedagógico orientado a la realidad global que vivimos”.
El colegio ofrece un modelo de inmersión en euskera y francés con el objetivo de que los estudiantes sean competentes en tres idiomas, los dos anteriores y el castellano. Para ello, los alumnos cuentan en el equipo docente con un referente en francés y otro en euskera.
De esta manera, los estudiantes alternan docente e idioma cada día a través de un modelo bilingüe en educación infantil -euskera y francés-, que pasa a ser trilingüe en Primaria sumando el castellano.
En el presente curso, acoge ya hasta 75 niños y niñas de hasta 4 años, distribuidos en cinco grupos, y provenientes fundamentalmente de las zonas de Donostialdea e Irun. Cinco maestras y dos asistentes se ocupan de la atención educativa.
La metodología activa de Larrun se estructura en txokos o espacios de aprendizaje para propiciar un aprendizaje más autónomo, que están dedicados a materias como la lectura y escritura, la lógica matemática, el juego simbólico, la plástica y la construcción.
Al final de su etapa de escolarización, los alumnos podrán obtener el doble diploma BachiBac -consistente en el título del Bachillerato más el del Baccalauréat francés- y continuar su educación superior en cualquiera de las tres lenguas.
“Apostamos por la formación de los jóvenes en un marco abierto y multilingüe”
Lehendakari
“Sin las familias que han apostado por Larrun este proyecto no habría sido posible”
Directora del colegio Larrun