Un total de 17 motoristas han fallecido este año en las carreteras de Euskadi, un colectivo que por su elevada siniestralidad es el que más preocupa a la dirección de Tráfico del Gobierno Vasco, que lo ha convertido en prioritario en su estrategia de seguridad vial para los próximos años.

La Directora de Tráfico del Gobierno vasco, Sonia Díaz de Corcuera, así lo ha manifestado durante la presentación este viernes en Bilbao de los datos provisionales de accidentalidad, siniestralidad y movilidad de 2021.

A falta de concluir la jornada de hoy, este año se han contabilizado en Euskadi 42 personas fallecidas por accidente de tráfico, 9 menos que en 2019, a pesar de la progresiva recuperación de la movilidad casi a niveles prepandemia.

CUATRO DE CADA DIEZ FALLECIDOS ERAN MOTORISTAS

El 40 % de ellos han sido motoristas (16 conductores y una ocupante). En contra de la tendencia descendente de la siniestralidad en las carreteras y calles vascas, los motoristas fallecidos en accidente de tráfico han pasado de 16 en 2019, último comparable en términos de movilidad, a 17 en 2021 (en 2020, marcado por las restricciones en la movilidad debido a la pandemia de covid-19 fueron nueve).

La directora de Tráfico ha detallado que en 14 de los 17 accidentes de tráfico en los que murió un motorista no hubo ningún otro vehículo implicado.

Entre las causas de estos siniestros, se encuentran el no mantener el intervalo de seguridad, el exceso de velocidad, la falta de pericia, el deficiente mantenimiento de los neumáticos, los adelantamientos inadecuados y la conducción distraída o negligente.

Ha considerado, por ello, que se trata de accidentes que "se pueden evitar siendo responsable, siendo diligentes, adecuando la velocidad, teniendo un buen mantenimiento del vehículo y con formación".

OBJETIVO: "CERO VÍCTIMAS" EN 2050

Díaz de Corcuera ha señalado que en general, Euskadi consolida una tendencia descendente en términos de número de accidentes en las carreteras, que este año, con 7.209 siniestros contabilizados, desciende un 15 % con respecto a 2019.

Si en el año 2000 se registraron 218 fallecidos en las carreteras vascas, esa cifra se situó en 67 en 2010; en 51 en 2019; en 38 el pasado año, marcado por las limitaciones a la movilidad provocadas por la pandemia; y en 42 este año.

Además, este año se han registrado 417 heridos graves en accidente de tráfico, 33 menos que en 2019.

Según la directora de Tráfico, "nos vamos acercando" al objetivo de ir reduciendo el número de fallecidos y heridos graves en accidente de tráfico, teniendo como horizonte el año 2050 con "cero víctimas" en las carreteras.

Por territorios, en 2021 se ha desplomado la siniestralidad en las carreteras en Bizkaia, con 16 fallecidos, 6 menos que en 2019; mientras que también baja en Gipuzkoa, donde se han contabilizado 16 muertos, 3 menos que hace dos años; y se mantiene en Araba, con 10 fallecidos.

DOS CICLISTAS Y UN PEATÓN FALLECIDOS

El 48 % de las personas fallecidas en Euskadi pertenecía a un colectivo "vulnerable". Además de los 17 motoristas fallecidos, murieron en accidente dos ciclistas y un viandante (el número de peatones fallecidos fue de 13 en 2019 y de 6 en 2020).

En total, el porcentaje de "vulnerables" que han perdido la vida este año ha descendido un 11 % respecto a 2019, cuando la cifra alcanzó el 59 %.

De cara a esta Nochevieja y dada la situación epidemiológica existente, la directora de Tráfico ha aconsejado evitar desplazamientos innecesarios, así como las concentraciones de personas, con el fin de frenar la expansión del virus. En caso de tener que viajar, ha pedido "mucha responsabilidad" y prudencia al volante.

SUSPENSIÓN DE CONTROLES DE ALCOHOLEMIA Y DROGAS

Por otro lado, ha señalado que la suspensión de los controles preventivos de alcoholemia por parte de la Ertzaintza debido a la escalada de contagios no significa que no se llevarán a cabo con ocasión de accidentes de tráfico o de infracciones de la norma.

Ha recordado, asimismo, que en 2020 también se dejaron en suspenso los controles preventivos para prevenir contagios y salvaguardar la salud de los agentes que efectúan esa labor.