- El Gobierno francés hará todo lo posible para evitar otro confinamiento con la nueva oleada que se viene encima con la variante ómicron, según el ministro de Educación, Jean-Michel Blanquer, que insistió en que si hay nuevas restricciones “la escuela es lo último que hay que cerrar”. En una entrevista al canal BFMTV, Blanquer subrayó ayer cuando se le preguntó por la posibilidad de cerrar los centros escolares que “no es la hipótesis privilegiada”, aunque todas las opciones “están encima de la mesa”.
Los alumnos deberán volver a las aulas tras las vacaciones de Navidad el 3 de enero, pero algunos epidemiólogos y responsables políticos piden que la actividad en las aulas no se reanude al menos hasta una semana más tarde, ante el riesgo de que eso multiplique los contagios.
El ministro recordó que desde el comienzo de la crisis ha habido presiones para que se suspendan las clases presenciales y que él ha resistido “en lo posible a esas presiones” con la idea de que “la escuela es lo último que hay que cerrar”. En lo que al confinamiento respecta, Blanquer afirmó que se hará “todo lo posible para evitarlo”.