Las comunidades han inoculado hasta la fecha casi un millón (1.069.417) de dosis adicionales a pacientes considerados de alto riesgo, personas en residencias y mayores de 70 años, en un contexto de vacunación en el que han aumentado los grupos de ciudadanos que van a recibir un pinchazo extra.

El informe de vacunación del Ministerio de Sanidad indica que los servicios de salud de las comunidades han inoculado 923.140 dosis de Pfizer y 151.713 de Moderna, las vacunas de ARN-mensajero que se destinan para los casos que requieren pinchados adicionales o de recuerdo, según las indicaciones de las agencias internacionales y de la Ponencia de Vacunas.

En el Estado hay más de 6,5 millones de mayores de 70 años, alrededor de 320.000 personas en residencias (la mayoría ya tiene su dosis adicional) y más de 260.000 pacientes considerados inmunodeprimidos graves por tratamientos contra el cáncer o trasplantes de órganos.

Estos últimos, junto con los mayores en las residencias, fueron los primeros en comenzar a recibir la tercera dosis en el mes de septiembre, mientras que los mayores de 70 comenzaron el 25 de octubre, junto con la vacunación contra la gripe.

Según las indicaciones de Sanidad, la dosis extra también se dispensa a personas con determinadas patologías o cuadros clínicos, consideradas de graves o de "alto riesgo", aunque no existe un censo de estos pacientes, ya que la decisión de citarles para el pinchazo va en función de la estrategia de los propios hospitales de referencia.

Esta misma semana comenzarán a recibir también un pinchazo extra todos los vacunados con el preparado monodosis de Janssen, casi dos millones de ciudadanos en el Estado, comenzando por los mayores de 70 años. Para ellos, será su segunda dosis.

DIFERENCIA ENTRE DOSIS ADICIONAL O DE RECUERDO

La estrategia de Sanidad cataloga las terceras dosis o extra en pinchazos "adicionales" y de "recuerdo".

Los adicionales se destinan a inmunodeprimidos o a personas mayores con el sistema inmunitario debilitado para que consigan la máxima protección, mientras que las dosis de recuerdo se dirigen, de momento, a las personas mayores de 70 años, ya que la edad es un factor de riesgo para desarrollar una covid grave.

Con la dosis de recuerdo también se pinchará o a los vacunados con el preparado monodosis de Jannsen, cuya farmacéutica ya avisó hace meses que sería necesario que los que hubieran recibido su vacuna necesitarían un pinchazo de recuerdo, aunque la decisión de las autoridades sanitarias es hacerlo con una vacuna de ARN-mensajero, es decir Pfizer o Moderna.

Los estudios sobre la eficacia de las vacunas han puesto de manifiesto que tanto las de ARN-mensajero (Pfizer y Moderna) y las basadas en tecnología de adenovirus (AstraZeneca y Janssen) protegen ante un covid grave que requiera hospitalización o fallecimiento, pero que estas últimas pierden algo más de eficacia contra la infección con el paso de los meses.

En este sentido, los ensayos clínicos comparativos, elaborados por salud Pública y el Instituto de Salud Carlos III, dilucidaron que, con el discurrir de los meses, Moderna es la que mantiene la mayor efectividad frente a una infección sintomática (89 %), seguida de Pfizer (78 %).

Además, la última actualización de la estrategia de vacunación de Sanidad, publicada este lunes, indica sobre la vacuna de Moderna que, cuando se trate de un pinchazo de "recuerdo" se aplicará solo media dosis, mientras que si se trata de Pfizer se inoculará la dosis completa, la misma que en los pinchazos anteriores.

TERCERAS DOSIS SOLO PARA DETERMINADOS COLECTIVOS

La decisión final de administrar una tercera dosis de ARN-mensajero a los mayores de 18 años, como recomendó la Agencia Europea del Medicamento (EMA), corresponde a cada país, aunque fuera del continente europeo algunos países como Israel o Chile llevan a cabo esta estrategia para la población adulta desde hace meses y fueron los primeros en comenzar a inocularla.

En el Estado, la mayor parte de la comunidad médica y expertos en epidemiología consideran que, en el actual escenario, la tercera dosis solo debe administrarse a colectivos considerados de alto riesgo o que necesiten una dosis extra para aumentar el nivel de protección, como el caso de los vacunados con Janssen.

Por ello, apuestan por donar los excedentes de vacunas a través del mecanismo internacional COVAX a los países en vías de desarrollo con el fin de que mejoren su tasa de vacunación.

Los datos de Sanidad sobre la vacunación en el Estado arrojan un 80,2 % de población total con alguna dosis inoculada y de ese porcentaje, han recibido ya la pauta completa, el 78,6 %. Más de 4 millones de ciudadanos no se han vacunado.

Sigue pendiente de la recomendación de la Agencia Europea del Medicamento la vacunación infantil (5,3 millones de niños menores de 11 años) de la que se baraja en primera instancia que se autorice para el tramo de 5 a 11, en línea con los ensayos clínicos previos de Pfizer.