Roma - Italia comenzó ayer a implementar las medidas extraordinarias decretadas por el Gobierno para tratar de frenar la expansión del coronavirus y que incluyen el bloqueo de la región de Lombardía y de otras 14 provincias pero también numerosas restricciones en todo el país. Algunas de estas draconianas normas se pusieron en práctica enseguida, como el cierre de museos, cines o lugares turísticos por todo el país -los colegios ya estaban cerrados desde la semana pasada- pero no así el aislamiento total de las "zonas rojas" del norte. A lo largo del día, el tráfico por carretera, ferrocarril y aéreo entre la capital lombarda, Milán, y Roma y otras partes de Italia no se interrumpió, mientras varias regiones del sur anunciaron que se impondrán cuarentenas a todas aquellas personas que lleguen de las zonas aisladas.
El presidente del Gobierno italiano, Giuseppe Conte, firmó la pasada madrugada el decreto con el que se quiere luchar contra la imparable difusión del coronavirus, que ya ha causado 366 muertos -con un aumento de 133 en solo 24 horas- y más de 6.000 contagiados.
La norma aísla prácticamente y paraliza una zona que incluye toda la región de Lombardía y otras 14 provincias italianas del norte: Módena, Parma, Piacenza, Reggio Emilia, Rimini, Pesaro, Urbino, Venecia, Padua, Verbano-Cuscio-Osola, Treviso, Vercelli, Novara, Asti y Alessandria, y donde viven en total 16 millones de personas. La medida más extrema es la que prohíbe entrar o salir de ese territorio, excepto para comprobadas exigencias laborales o extraordinarias como motivos de salud.
Y entre otras se alarga en estas zonas el cierre de guarderías, colegios de todos los niveles y universidades tanto públicas como privadas hasta el 3 de abril, y también se cierran gimnasios, piscinas, estaciones de esquí, centros culturales, discotecas, teatros, cines y pubs. Se suspenden todas las manifestaciones públicas y competiciones deportivas, excepto aquellas de profesionales que se tendrán que realizar a puerta cerrada, y se prohíben bodas y funerales. Se mantienen abiertos bares y restaurantes hasta las 18.00 horas (17.00 GMT), pero manteniendo un espacio de al menos un metro entre las personas.
Y para el resto de Italia se refuerzan las medidas ya aprobadas, como el cierre de colegios, y se cierran también los teatros, cines, museos y monumentos. En Roma, los principales monumentos y museos echaron el cierre hasta el 3 de abril, en cumplimiento del decreto extraordinario. El Coliseo, la Colina Palatina, los Foros, las termas de Caracalla, el Panteón, los Museos Vaticanos... colgaron los carteles de cerrado en medio de la decepción de los (pocos) turistas que aún pasean por la ciudad eterna, al igual que en muchos otros destinos de Italia, como las ruinas de Pompeya junto a Nápoles.
Sin embargo, el cerrojazo a las regiones más afectadas por el coronavirus -incluidas por el Gobierno en la nueva zona roja ampliada- no se cumplía ayer. Los trenes entre Roma y Milán, capital de Lombardía, seguían circulando por el momento, al igual que los vuelos entre ambas ciudades. En la estación de Termini, en la capital italiana, seguían llegando los trenes de Milán y también saliendo hacia allí, según informó Efe. En el aeropuerto de Fiumicino, el principal de Roma, también se observaba muy poco movimiento de pasajeros pero de los cuatro vuelos programados para la mañana desde Milán Linate solo uno fue cancelado, mientras los otros aterrizaron prácticamente vacíos. Siguieron saliendo los vuelos hacia destinos del norte, como Milán o Venecia y los vuelos internacionales programados operaron con normalidad.
La compañía Alitalia anunció que suspenderá desde hoy todos sus vuelos internacionales desde los aeropuertos de Milán y solo seguirá operando los nacionales desde Milán Linate, pero con una reducción de las frecuencias. "Desde el 9 de marzo, la aerolínea italiana suspenderá todos los vuelos nacionales e internacionales hacia y desde el aeropuerto de Milán Malpensa. El último servicio de Alitalia hacia el aeropuerto de Milán Malpensa será el vuelo AZ 605 desde Nueva York que aterrizará en Malpensa a las 10.40 de mañana", señaló un comunicado. Hasta el 3 de abril, Alitalia "solo operará conexiones nacionales desde Milán Linate, con una reducción en las frecuencias de las rutas servidas, mientras que los destinos internacionales serán accesibles con vuelos a través de Roma".
Las regiones de Campania, Apulia y Sicilia han establecido cuarentenas y el aislamiento domiciliario para aquellas personas que llegan de las áreas afectadas por el decreto. "Les hablo como si fueran mi hijos, mis hermanos, mis nietos: paren, vuelvan atrás. Bájense en la primera estación de ferrocarril, no tomen aviones hacia Bari y Brindisi, regresen con los autos, bajen del autobús en la próxima parada", escribió el presidente de Apulia, Michele Emiliano, en su Facebook. "Están trayendo a los pulmones de sus hermanos y hermanas, sus abuelos, tíos, primos y padres el virus que ha devastado al sistema de salud del norte de Italia", añadió.