Las bodas de homosexuales crecieron un 10% en Euskadi en 2017 y el resto se mantiene

BILBAO. El Instituto Vasco de Estadística, Eustat, ha precisado que las bodas entre personas de diferente sexo fue de 7.861, apenas 13 bodas más que el año anterior. Entre los homosexuales hubo 199, de las cuales 116 entre mujeres y 83 entre hombres, con lo que se ha invertido la tendencia de hace unos años en que había más matrimonios entre hombres del mismo sexo que entre mujeres.

La tasa total de nupcialidad vasca se sitúa en 3,4 matrimonios por mil habitantes, cifra algo inferior a la española (3,6) y a la de la UE (28 países), que en 2015 ascendía a 4,3.

Otro dato curioso es que por primera vez en Euskadi las bodas celebradas en viernes superan a las oficiadas en sábado. Aunque el sábado ha sido tradicionalmente el día en el que se han oficiado más de la mitad de las bodas -tanto porque más del 90 % de las religiosas tenían lugar ese día como porque era la jornada escogida por algo más del 40 % en las civiles- ahora la tendencia ha cambiado.

El gran aumento de las bodas civiles, unido al hecho de que, a partir de 2009, prácticamente la mitad de ellas pasaran a celebrase en viernes, ha hecho que 2017 sea el primer año en el que haya más bodas en viernes que en sábado, aunque la diferencia sólo sea de 98 (3.346 frente a 3.248).

Continúa por otro lado aumentando la edad de los contrayentes, 37,1 años de media para los hombres soleteros y de 34,9 años para las mujeres solteras. En estos últimos 25 años la edad media de los esposos ha aumentado en 7,7 años y en 7,8 en el caso de las esposas.

En cuanto al mes de celebración, septiembre ocupó el primer lugar con 1.304 bodas, seguido por julio con 1.280 y por junio con 1.170.

El número de bodas civiles ha pasado de representar el 23 % en 1990 al 83,1 % en 2017.

De las religiosas, hubo 1.303 matrimonios católicos y 27 de otras confesiones religiosas.

En el 17 % de los matrimonios al menos uno de los cónyuges tenía nacionalidad extranjera, sobre todo la esposa (43,9 %) frente al 23,7 % de los casos en los que el esposo era de otro país. En el 32,5 % restante ambos cónyuges lo eran.