Benidorm - Un grupo de turistas británicos que se encontraba en Benidorm para celebrar una despedida de soltero pagó 100 euros a un indigente a cambio de que se dejara tatuar el nombre de uno de ellos, el novio, en la frente. La historia se ha conocido a raíz de que se haya destapado en las redes sociales el inicio de una colecta por parte de la presidente de la Asociación de Comerciantes Británicos de la ciudad, Karen Maling, con el fin de borrarle el tatuaje. Los hechos se remontan al pasado mes de mayo, cuando el grupo de turistas se encontró con el indigente, un ciudadano polaco de 34 años con problemas con el alcohol.
Al parecer, según la propia Karen Maling, esos británicos se aprovecharon de su estado para ofrecerle el dinero a cambio de dejarse hacer el tatuaje. Este, sin embargo, no pudo ser completado debido “al fuerte dolor que le estaba causando” el tatuador, una persona cuyo comportamiento por este asunto, al igual que el de los británicos, ha sido criticado y repudiado. - Efe