Madrid - Mirar el móvil cuatro segundos mientras conducimos a 100km/h supone recorrer a ciegas un campo de fútbol; si escribimos un mensaje, la distancia se quintuplica. Las distracciones al volante son ya la primera causa de los accidentes mortales y atajarlas se ha convertido en el objetivo número uno de la DGT.

Para ello, doce años después de la puesta en marcha del carné por puntos, Pere Navarro, el padre de esa medida -que fue una de las principales causas de una histórica reducción del número de víctimas mortales en las carreteras-, ha retomado el control de Tráfico con una prioridad: reformar el carné para castigar con más dureza el uso del móvil al volante.

Al director de Tráfico no le gusta ni siquiera el uso del manos libres (considera que distrae más la conversación que el llevar el teléfono en la mano), pero su principal preocupación es el uso de esas tecnologías para enviar y leer mensajes de texto.

medidas Sobre la mesa, Pere Navarro ya tiene clara una primera iniciativa: aumentar la retirada de puntos de los 3 actuales a 4 o, incluso, 6 a quienes usen el móvil, programen un GPS, usen cascos u otros dispositivos que disminuyan su atención al volante. “Es una tema de máxima alerta y de alguna manera tendrá que tener su reflejo”, defendió el director que, sin embargo, no se ha pronunciado sobre si la multa actual de 200 euros también aumentará.

Alineadas con la DGT están las asociaciones de víctimas y la Fiscalía especial de Seguridad Vial que ha remitido recientemente un oficio a todas las policías de tráfico para que investiguen si conductores implicados en un siniestro han usado el móvil.

Y es que según sus datos, de las 600 muertes producidas por salida de vía el año pasado, una mayoría tuvo como causa el empleo del teléfono, una distracción contra la que las víctimas también se muestran muy combativas porque desde 2016 los despistes son la primera causa de accidentes mortales. - L. C.