Donostia - Un hombre aceptó ayer una condena de cuatro años y medio de cárcel por abusar sexualmente de una adolescente, aquejada de una discapacidad, con la que había mantenido una relación sentimental que había acabado cuando ocurrieron los hechos.

El acusado reconoció los hechos y admitió la pena que solicitaba para él la Fiscalía como responsable de un delito de abuso sexual a una joven, menor de 16 años, tras lo que pidió perdón a los padres de la víctima, quienes se encontraban presentes en la sala. Inicialmente, la Fiscalía pedía once años de reclusión para este hombre, mientras que la acusación particular, que ejercían los progenitores de la menor, demandaba quince años de prisión. No obstante, momentos antes de la vista, el Ministerio Público accedió a aplicar al procesado las atenuantes de alteración psíquica y reparación del daño causado, ya que el inculpado padece una discapacidad intelectual y ya ha compensado parcialmente a la víctima por estos hechos. Tanto la acusación particular como el encausado se han mostrado conformes con estas modificaciones, por lo que ahora el hombre ha sido condenado a cuatro años y seis meses de cárcel y a indemnizar a la perjudicada con 7.000 euros por los daños morales causados.

Además, el procesado no podrá comunicarse con la víctima ni aproximarse a ella durante diez años y, tras cumplir la pena de prisión, deberá permanecer un máximo de siete años en libertad vigilada. Asimismo, ha sido inhabilitado para cualquier profesión en la que tenga contactos con menores de edad. - Efe