MADRID. Estas son algunas de las consideraciones que se han realizado en el Senado, en la víspera del Día Mundial de la Diabetes que este año lleva como lema "Diabetes y Mujer".

Y las han realizado la presidenta de la Sociedad Española de Diabetes (SED), Anna Novials; el presidente de la Federación Española de Diabetes (FEDE), Andoni Lorenzo, y la subdirectora general de Calidad e Innovación en Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Paloma Casado.

Cerca de un 30 % de mujeres entre los 61 y los 75 años padecen diabetes tipo 2, un porcentaje que llega al 42 en el caso de los hombres.

A partir de los 75 años, las cifras se invierten ya que el 40 % de ellas sufre la patología frente al 36,4 % de los hombres.

El Día Mundial de este año se ha centrado en la mujer porque la diabetes en ellas tiene una peculiaridades y además complica más su salud que en los hombres. Tienen un 30 % más de posibilidades de sufrir ictus y un 154 % más de riesgo de enfermedad coronaria.

Sin embargo, ese riesgo aún no ha calado con la profundidad que debería en las mujeres ya que buena parte de ellas, tal y como ha explicado Novials, sigue pensando que "los infartos son cosa de los hombres".

La enfermedad coronaria era antes la patología masculina 'por excelencia' por factores como el estrés laboral o porque ellos fumaban más, pero a medida que las mujeres se han ido incorporando al mercado de trabajo y al hábito de fumar las cifras se han ido igualando e incluso en estos momentos ellas superan el riesgo cardiovascular.

Ese riesgo se ha estabilizado en el hombre, pero en la mujer ha aumentado y, según Novials, "existe un déficit de tratamiento por parte del sistema sanitario" ya que los médicos no advierten tanto de sus riesgos.

Pero, además, por un rol de género y social que muchas siguen adoptando ellas primero cuidan "a toda la familia y luego se ocupan de sí mismas", con lo que, según han recalcado los expertos, tienen más falta de adherencia al tratamiento.

Ellas, además, deben de seguir la medicación de forma más rigurosa porque por el hecho de ser mujeres, por factores fisiológicos y hormonales, sufren más complicaciones metabólicas.

Por eso, hace falta abordar de una forma peculiar la diabetes en la mujer ya que, según Lorenzo, es más resistente a los tratamientos con insulina, sufre más episodios de hipoglucemia y la que padece un ataque cardíaco tiene tasas de supervivencia más baja.

Ante estos datos "muy preocupantes", Lorenzo ha abogado por impulsar el diagnostico precoz de la diabetes tipo 2, la prevención del sobrepeso y la obesidad, la mejora de los hábitos saludables y campañas de concienciación y sensibilización.

Unas medidas importantes si se tiene en cuenta que hasta un 70 % de los casos de diabetes tipo 2 se podrían prevenir a través de cambios en el estilo de vida, y ahí el papel de la mujer es fundamental porque es la que "educa" a alimentarse de forma saludables a los miembros de la familia.

Lorenzo ha insistido además en la necesidad de renovar la Estrategia frente a la Diabetes del Ministerio de Sanidad y para ello ha pedido que la ministra se reúna con las asociaciones y federaciones con el objetivo de consensuar una "hoja de ruta".

La representante del Ministerio se ha mostrado abierta a esa propuesta y ha remarcado las distintas medidas que ya se están realizando para promover la salud y los estilos de vida saludable, como las escuelas de salud para la ciudadanía.