MADRID. "Todos los niños y niñas que formamos Avanza sin Miedo queremos mostrar nuestro más firme apoyo a los hijos de Juana Rivas, Gabriel y Daniel, y hacer llegar a las instituciones nuestro más profundo pesar y repulsa por obligar a dos menores a irse con una persona condenada por maltrato, sin haber sido previamente escuchados de manera legítima y adecuada", señala esta organización en un comunicado.

Sostiene que "una vez más" las instituciones "se comportan como verdugos" de los menores "perpetuando su dolor y sufrimiento". En este sentido, recuerda el caso de Ángela González, cuya hija fue asesinada en 2003 después de que las instituciones se negasen en activo a tomar las medidas adecuadas para la protección de la menor.

Esta entidad insite en que los menores sean escuchados en los procesos judiciales y administrativos a la hora de tomar decisiones sobre sus propias vidas, un derecho reconocido por Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas, así como por la Ley de protección Jurídica del Menor.