Bilbao - El Comité de Unicef en el País Vasco ha reivindicado introducir en la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) un complemento económico por hijo menor de edad a cargo, además de avanzar hacia una prestación económica universal por hijo.

Así lo indica la organización en su informe Situación de la infancia y adolescencia en Euskadi. Hacia un Pacto Vasco por la Infancia y la Adolescencia, presentado ayer por el presidente y la coordinadora del comité en el territorio, Isidro Elezgarai y Elsa Fuente, respectivamente. El estudio, que aborda aspectos como la salud, la educación o el bienestar material de la infancia, pone el foco en la necesidad de un acuerdo interinstitucional en aras de que los aspectos relacionados con la infancia tengan cada vez más relevancia en las políticas públicas.

En esta línea, ambos responsables reclamaron una mayor inversión pública en términos de familia e infancia dentro de la partida de protección social, lo que supondría “una profunda reestructuración del actual sistema, que está especialmente orientado a proteger a la población adulta y mayor”, según resaltó Elezgarai. En opinión de Elsa Fuente, la función de familia e infancia supuso un gasto de 223,2 euros por habitante en 2015, frente a los 3.000 euros de media por persona que se derivan del gasto total destinado al ámbito de la vejez.

Cuestiones de salud Pese a que a nivel general la situación de la infancia y la adolescencia es “buena” en Euskadi, un país que “protege”, hay gente que “se queda fuera”, opinó Elezgarai, quien añadió que “las oportunidades y las condiciones de vida de los niños están muy determinadas por el estatus socioeconómico de su familia, por el empleo, los ingresos y el capital cultural de sus progenitores”. Así, Fuente respaldó con datos extraídos de la última Encuesta Nacional de Salud 2011/2012, que un 21,1% de niños y adolescentes vascos de 4 a 14 años de edad presentan riesgo de mala salud mental, esto es, cuadros de ansiedad o depresión. El dato se sitúa por delante de la media estatal, fijada en el 17,1%, alertó la coordinadora.

En esta línea, reiteró la demanda ya expresada en anteriores ocasiones por Unicef de incorporar en el ámbito de la psiquiatría un acompañamiento a estos niños en salud mental, pues “muchas veces”, reprochó, “se les está tratando igual que si fuesen adultos”. “No es darles la mitad de un medicamento, sino tratarlos y acompañarlos”, insistió.

En materia de salud, Fuente destacó asimismo el aumento de niños y jóvenes vascos de 2 a 17 años que presentan obesidad o sobrepeso, un porcentaje que ha pasado del 19,5% en 2006 al 32,5% en 2012, para situarse actualmente por delante de la tasa que se observa en el conjunto del Estado. Estas cifras llevaron a la coordinadora de Unicef a defender que se fomente desde las administraciones la adquisición de hábitos saludables entre la población infantil. - Efe