toledo - Un bebé de 10 meses falleció la madrugada de ayer en el Hospital Virgen de la Salud de Toledo hasta donde fue trasladado tras chocar el coche en el que viajaba con su madre, que dio positivo en alcohol y drogas, y otro menor de siete años contra una farola en la localidad toledana de Gerindote. El suceso tuvo lugar en la calle Estación, que es la travesía de la CM-4009.

Como el bebé, el otro varón de 7 años fue trasladado al Hospital Virgen de Salud donde quedó ingresado. Mientras, la madre de los niños, también herida, fue trasladada por su marido hasta el hospital.

Fuentes de la Guardia Civil precisaron que, al practicarle la prueba de alcoholemia, la mujer dio positivo en consumo de alcohol y doblaba el máximo permitido de 0,25 miligramos por litro en aire expirado, además de dar positivo en el test de drogas por consumo de cocaína.

Las mismas fuentes informaron, además, que el bebé fallecido y su otro hijo viajaban sin los amarres obligatorios.

La Guardia Civil de Toledo explicó la conductora del vehículo no sería detenida, al estar plenamente identificada, y se le permitiría que acuda al funeral de su hijo que se ofició ayer. Tras el entierro, según las fuentes, los agentes procedieron a su detención y practicaron las diligencias correspondientes.

El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, José Julián Gregorio, explicó que se está a la espera de los “contraanálisis para ver si se confirman los primeros test” que hizo la Guardia Civil in situ a la conductora, que dio positivo en alcohol y drogas.

Por su parte, fuentes de la investigación informaron de que la mujer no tiene antecedentes por delitos de tráfico ni sanciones, si bien acumula antecedentes por delitos contra el patrimonio.

nuevas medidas Por otro lado, la Dirección General de Tráfico (DGT) aseguró que reforzará las actuaciones encaminadas a garantizar que las personas a las que se ha retirado el permiso de conducir por ponerse al volante bajo los efectos del consumo de alcohol y drogas realmente no conducen. Entre otras cosas, esta es una de las medidas que se plantea llevar a cabo la DGT para poner fin a la “insoportable siniestralidad” de los ciclistas en las vías españolas.

“Retirar el permiso de conducir no garantiza que esa persona no conduzca. Por eso vamos a intentar asegurarnos de que no lo haga”, declaró Serrano. - Efe/E.P.