Oviedo - Salvamento Marítimo logró rescatar ayer a los doce tripulantes del pesquero gallego hundido a unas 50 millas al norte de la costa de Navia (Asturias), a los que fueron trasladados en helicóptero a Gijón y Celeiro (Lugo). Los tripulantes presentaban síntomas de hipotermia que no revistieron importancia y de la que fueron tratados por personal sanitario. El barco, denominado Gure Uxua ya que fue comprado hace años en Mutriku, terminó de hundirse al norte de la costa asturiana en una jornada en la que Asturias se encontraba en alerta naranja por fuerte oleaje. De hecho, la boya oceanográfica del Observatorio Marino de Asturias, situada a unos 4 kilómetros de la costa de Cudillero, registraba olas de gran envergadura.

El barco se encontraba a unas 50 millas del litoral asturiano cuando la tripulación detectó una vía de agua. Salvamento Marítimo tuvo conocimiento a través de la radio costera sobre las 15.20 horas, y cinco minutos más tarde saltó la radiobaliza. El hundimiento fue tan rápido que algunos miembros de la tripulación no tuvieron tiempo de coger el chaleco salvavidas. De inmediato fueron movilizados los dos helicópteros de Salvamento Marítimo con base en Celeiro y Gijón, que son los que procedieron al rescate, así como un tercero del servicio gallego de guardacostas. Además, también se movilizaron tres embarcaciones del organismo dependiente del Ministerio de Fomento. Al llegar a la zona, los medios de rescate se encontraron con toda la tripulación en una balsa salvavidas.

El pesquero Gure Uxua tiene base en el puerto gallego de Cariño, es un palangrero de fondo con casco de acero y 24 metros de eslora. El barco entró en servicio el 19 de mayo de 1998, según los datos del centro de flota pesquera operativa. El patrón es natural de Santander y entre la tripulación hay varios portugueses y gallegos. El alcalde de Cariño (A Coruña), José Miguel Alonso Pumar, relató que el buque, dedicado a la pesca de la merluza, se vio afectado por un “temporal muy grande” y que “no les dio tiempo” a encontrar un punto de abrigo. - Efe / E. Press