Bilbao - La OMS prevé erradicar la tuberculosis para 2035. ¿Cree que será posible?
-El objetivo de la OMS para 2035 es reducir la mortalidad por tuberculosis un 95% y la incidencia un 90% comparando con los datos del 2015. Con la implantación de las directrices de la OMS para el control de la tuberculosis se han evitado que 43 millones de personas fallecieran por tuberculosis entre 2000-2014. Creo que vamos por buen camino, las tasas de incidencia y de mortalidad por tuberculosis han disminuido notablemente.
¿Qué motiva la aparición y propagación de esta enfermedad?
-La tuberculosis se contagia de persona a persona, habitualmente por vía área, inhalando el bacilo tuberculoso. El infectado en función de su estado inmunitario y de su situación nutricional, desarrollará ó no la enfermedad a lo largo de su vida. Por ello, la pobreza, la desnutrición, los hábitos higiénicos inadecuados y el hacinamiento favorecen la transmisión y desarrollo de la enfermedad.
¿Cuándo se han producido los brotes más importantes de tuberculosis en Euskadi?
-Con la aparición del VIH, en la década de los 80, el número de pacientes con tuberculosis aumentó de forma notable. En aquellos años frecuentemente el diagnóstico de infección por VIH y de tuberculosis se realizaban a la vez, cumpliendo al tener ambas criterios de sida y tenían una mortalidad alta. El desarrollo de los tratamientos antirretrovirales de gran actividad, ha supuesto un gran salto mejorando mucho la evolución y el pronóstico de los pacientes con sida. En 2015 hubo dos brotes de tuberculosis en Bizkaia y este año se ha registrado un brote en la UPV con gran repercusión social. Pero estos no son comparables con la época del inicio del sida.
¿Cuál es el mayor problema para acabar con la tuberculosis ya que no consigue ser atajada al mismo ritmo que la malaria o el sida?
-La tuberculosis es una enfermedad que tiene tratamiento y se cura pero ello implica tomar el tratamiento de forma correcta durante, al menos, 6 meses. Si no se hace correctamente seguimos propagando la enfermedad, y además favorecemos la aparición de cepas resistentes. Sin embargo las tasas de enfermedad, la posibilidad de acceder al diagnóstico y al tratamiento precoz, la mortalidad por la enfermedad y las resistencias a los fármacos antituberculosos son muy diferentes de unas regiones a otras del mundo.
¿En qué momento las investigaciones ha dado un salto cualitativo más relevante para su cura?
-Con el descubrimiento de los primeros fármacos antituberculosos hace ya más de 60 años se dio el primer gran salto para la cura de la tuberculosis. Posteriormente en los años 70 y 80 se determinó la combinación óptima de fármacos antituberculosos y la duración del tratamiento. En los últimos años el desarrollo de los métodos moleculares para la detección rápida de resistencias han supuesto un gran avance. - C. Lago