madrid - España es el segundo país europeo con mayor tasa de niños viviendo en hogares bajo el umbral de la pobreza, con un 29,6% (más de 2.460.000 millones de niños), solo es superado por Rumanía y está lejos de la media europea del 21,1%, según un informe de Save the Children. En toda Europa, más de 25 millones de niños están en riesgo de pobreza o exclusión social, según datos recogidos por esta ONG en su análisis, que concluye que todos estos niños “conformarían el séptimo país más poblado de la Unión Europea”.
Save the Children señala que a pesar de la recuperación económica de nuestro país en los últimos años las tasas de pobreza infantil siguen siendo de las más altas de Europa. “Si además de los ingresos del hogar tenemos en cuenta si los padres trabajan o no y la capacidad para hacer frente a los gastos de alimentación, calefacción, ropa u ocio de los niños, España se sitúa en el quinto puesto del llamado índice Arope, que mide la pobreza y también la exclusión social, con un 34,4% de los niños en esta situación”, señala el informe.
Para esta ONG, España tiene más pobreza infantil “porque las ayudas sociales, de acceso restringido y condicionadas a que los padres trabajen son claramente insuficientes para reducirla”. “El porcentaje de niños en riesgo de pobreza antes de recibir las ayudas sociales es de 37,5% y después de las ayudas se queda en un 29,6%; es decir, las ayudas reducen la pobreza en 7,9 puntos porcentuales”, puntualiza.
La ONG lamenta que España sólo invierta el 1,3% del PIB en protección social a la infancia, mientras que la media europea es del 2,3%. “Para acabar con la pobreza infantil hay que tener voluntad política e inversión; todos los países tienen el deber de cubrir las necesidades de los niños y asegurarles un nivel de vida digno, con igualdad de oportunidades para todos”, reclamóAndrés Conde, director general de Save the Children.
desigualdades y educación El informe también destaca que España es uno de los países donde más han aumentado las desigualdades sociales desde 2008, según la OCDE, y recalca que “la desigualdad también es una de las consecuencias”. Además, denuncia una disminución constante del gasto público en educación, que en el caso de España se ha reducido el 12% y en la media europea el 3%.
Save the Children pide al Gobierno, entre otras medidas, que aumente la inversión en políticas de protección social de infancia y de educación. - Efe