MADRID. La madrugada del próximo sábado los relojes deberán adaptarse un año más al cambio de horario estacional y, en esta ocasión, cuando sean las 3.00 horas de la mañana se debe retrasar el reloj a las 2.00 horas, lo que puede afectar al sueño, la alimentación y el estado de ánimo sobre todo de niños y personas, según el doctor Alejandro Guillén-Riquelme, miembro de la Cátedra de Investigación del Sueño de la UGR-Grupo Lo Monaco.
Ante esta situación, aconsejan acostar a los niños un poco más tarde los días previos para que el cambio sea menos brusco, mientras que para el resto de la población es recomendable mantener los mismos hábitos y evitar fuentes de luz artificial en el cuarto como móviles, tablets u otros dispositivos.
"El cambio provoca que la persona tenga sueño y se duerma antes de la hora, despertándose con ello antes o que, acostándose a la misma hora se sienta desvelada. Además, puede influir sobre el levantarse antes de tiempo, llegando a cansarnos posteriormente más que antes del cambio de la hora", afirma Guillén-Riquelme.
Los efectos del cambio horario se producen porque afecta al ritmo circadiano, regulado por un sistema hormonal, que ajusta las principales actividades diarias del individuo como los momentos de dormir o comer. Aunque los efectos son leves para la salud, hay individuos a los que les influye más; entre los síntomas se encuentran cambios en el estado de ánimo, desvelos, irritabilidad, falta de concentración y cansancio.
Según el doctor Alejandro Guillén-Riquelme, "el cambio de hora afecta al ritmo circadiano, una especie de 'reloj' interno" gracias al cual el cuerpo se prepara para realizar distintas actividades a lo largo del día; así sentimos hambre a la hora aproximada a la que solemos comer o sueño en las horas cercanas a la de dormir".
El experto recuerda que no hay que preocuparse por estos cambios ya que, habitualmente, se reajustan por sí mismos pasados unos días. Además, para evitarlos o atenuar sus ejercidos aconseja mantener los hábitos de vida tal y como estaban antes del cambio de hora. "Por ejemplo, si no se tenía tendencia a dormir la siesta, sería un error dormirla en esos días, ya que va a dificultar el ajuste normal del cuerpo al cambio de hora, dificultando y alargando los síntomas producidos", explica.
CÁTEDRA DE INVESTIGACIÓN
El Centro de Investigación Mente, Cerebro y Comportamiento (CIMCYC) y la nueva Cátedra de Investigación del Sueño de la UGR-Grupo Lo Monaco, puestos en marcha este año en colaboración con la Universidad de Granada, llevan a cabo de manera conjunta investigaciones basadas en el estudio, evaluación, diagnóstico, tratamiento y seguimiento de aspectos relacionados con el sueño.
El Laboratorio del Sueño de la Universidad de Granada es el mayor centro de investigación de Europa de estas características. Gracias a esta colaboración sellada, Lo Monaco participará proporcionando financiación económica y capital humano, que irán destinados a contribuir con las investigaciones que se realicen en el marco de la misma. Además, la empresa donará a la UGR material para su uso en las instalaciones de la Cátedra (el Laboratorio del Sueño de la UGR).
La Cátedra de Investigación del Sueño de la UGR-Grupo Lo Monaco realiza trabajos centrados en el desarrollo de proyectos conjuntos de investigación; financiación de contratos, becas y ayudas a personal investigador y en prácticas; redacción de trabajos de investigación y de tesis doctorales y otras publicaciones; transferencia de resultados de la investigación a la empresa e impulso de la publicación de patentes u organización de cursos, seminarios, conferencias u otras actividades formativas y de divulgación, entre otros.