Bilbao - La Policía Nacional informó ayer de la detención en Bilbao de dos ciudadanos extranjeros a los que se les imputan los delitos de falsedad documental y estafa por cobrar presuntamente de manera indebida un total de 45.827 euros de Lanbide, desde el año 2011.

Este caso de fraude en las ayudas sociales que gestiona Lanbide -la Renta de Garantía de Ingresos y la Prestación Complementaria de Vivienda- se suma a otros similares descubiertos a lo largo de 2015 y por los que han sido detenidas personas procedentes de Pakistán, Marruecos, Argelia y otros países. En la mayor parte de los casos el fraude se realiza mediante la solicitud, obtención y cobro de ayudas gracias a documentación extranjera -pasaportes, certificados de matrimonio y libros de familia, etc.- falsa o alterada.

En el caso más reciente, los investigadores de la Policía han descubierto que uno de los hombres detenidos había usado para el cobro de las ayudas el pasaporte de su compatriota, que había entrado de forma irregular en el Estado español en 2014 y por lo tanto no podía cumplir los requisitos de tiempo mínimo de empadronamiento en Euskadi exigidos para acceder a la RGI. Según la información facilitada ayer por la Policía, la operación continúa abierta y no se descarta que se puedan producir nuevas detenciones.

La investigación fue desarrollada por la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Bilbao, perteneciente a la Jefatura Superior de Policía del País Vasco. Tal y como ha ocurrido en otras ocasiones, una vez que los trabajadores de Lanbide reciben una denuncia sobre presuntos cobros fraudulentos de ayudas, sospechan que algún perceptor está utilizando documentación que no está en regla o puede ser falsa, o detectan que una misma persona ingresa más de una ayuda, trasladan el caso a la Policía o la Ertzaintza para que sean sus expertos los que analicen los documentos presentados por el beneficiario.

Hace ahora un año, el Servicio de Investigación Criminal Territorial de Álava (SICTA) de la Ertzaintza sacó a la luz una trama pakistaní que cobraba numerosas ayudas sociales. Esta investigación se completó meses más tarde con la detención de varios miembros de la red en Gipuzkoa.