MADRID/Bruselas - Más de 110.000 inmigrantes y refugiados han llegado vía marítima y terrestre a Europa desde enero hasta el 18 de febrero de 2016, según las estimaciones de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Según los últimos datos publicados ayer por la OIM, desde que comenzó el año han perdido la vida 413 personas que intentaban llegar a Europa. La ruta del Egeo se ha convertido en la más mortífera, con 321 muertos en las primeras semanas del año, frente a las 92 registradas en el Mediterráneo Central.
Grecia sigue siendo el principal país de entrada en Europa, con 102.547 llegadas desde el 1 de enero, mientras que a Italia han arribado 7.507 personas hasta el momento.
De acuerdo con los últimos datos del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), ligeramente inferiores a los de la OIM, la cifra de llegadas de inmigrantes y refugiados se sitúa en 105.479 y la de muertos en 406.
El 85% de los que llegaron a Europa proceden de los diez principales países emisores de refugiados. Además, el 34% de los que llegan son niños y el 20% mujeres, siendo pues mayoría frente a los hombres adultos, que hasta principios del año 2015 eran quienes solían jugarse la vida en el mar en busca de un futuro mejor.
Por otro lado, Bélgica restablecerá temporalmente los controles sistemáticos en la frontera con Francia para evitar la llegada a su territorio de inmigrantes ante el desmantelamiento de la parte sur del campamento de la “jungla de Calais”, informó ayer el ministro belga del Interior, Jan Jambon. “Hemos informado a la Comisión Europea de que vamos a derogar temporalmente (el espacio de libre circulación) Schengen”, dijo Jambon.
En particular, el ministro anunció la intensificación a partir del miércoles de los controles en la frontera con entre 250 y 290 policías locales y federales, que serán desplegados diariamente en la zona.
En la práctica, los controles en la frontera entre Bélgica y Francia comenzaron a principios del pasado lunes. El ministro dejó ayer claro que la intensificación de los controles busca evitar que campos de refugiados como el de Calais se instalen en Bélgica. “Debemos evitar todo impacto económico en la costa y en el puerto de Zeebrugge”, manifestó.
Para ello, Bélgica pondrá en marcha controles sistemáticos desde hoy, que se aplicarán en lugares estratégicos que habitualmente sirven de paso a los inmigrantes en la frontera franco-belga. - E.P./Efe
Crece la tensión en Calais. El campamento de inmigrantes de Calais, donde cientos de clandestinos aguardan su oportunidad para entrar en el Reino Unido, vivió ayer una jornada tensa, ante la orden de evacuación parcial dictada por Francia y frenada por el momento.
80%
Un 80% de los refugiados tiene estudios secundarios o universitarios, así lo recoge un informe elaborado por ACNUR. A su vez, el 94% de los sirios que llegaron por mar a Grecia durante el mes de enero alegaron que escapaban de la violencia y el conflicto en su país.