vitoria - La picaresca y los engaños siguen a la orden del día, pero también es cierto que son minúsculos como demuestra el hecho de que tras 8.405 inspecciones cursadas hasta el pasado septiembre, únicamente 8 casos han acabado en sanción económica “llevándose recaudado un total de 6.756 euros”, informaban desde la Dirección de Vivienda del Gobierno Vasco. Una cantidad a la que habría que sumar los algo más de treinta y tres mil euros ingresados también durante este año en concepto de expedientes abiertos en ejercicios precedentes.

Las razones más habituales para incurrir en una de esas faltas son el hecho de tener desocupada una vivienda con una función social o, en los episodios más graves, haber cedido su uso a algún familiar o incluso alquilarla a terceras personas, tal y como ha constatado la brigada de inspectores encargada de visitar uno a uno esos pisos.

En total, concretaban desde el Departamento de Empleo y Políticas Sociales, a lo largo de este 2015 se han abierto expedientes sancionadores con origen en inspecciones de otros ejercicio. “Independientemente del año de clasificación de las fichas de inspección, en 2015 se han abierto 108 expedientes sancionadores; 54 han sido con sanción y se lleva recaudado un total de 33.204 euros”, ilustraban.

Del mismo modo, y en lo relativo exclusivamente a las inspecciones tramitadas hasta el pasado mes de septiembre, de esas 8.405 visitas de los inspectores a las VPO, 25 han supuesto ya apertura de expediente sancionador; y de estas 8 han acarreado una multa económica. En total, desde el año 2004 -cuando este servicio fue puesto en marcha-, la Administración Pública ha recaudado más de dos millones de euros.

La mayoría de las inspecciones realizadas durante los nueve primeros meses de este año estuvieron localizadas en Bizkaia (3.825 unidades), seguida de Araba (2.626 fichas abiertas de las que 2.396 corresponden a Gasteiz); y 1.954 en Gipuzkoa.