Bilbao - Al tratar de explicar la importancia de la nueva Ley de Derecho Civil Vasco hay una frase que se repite: da mayor libertad de testar. Y es que las nuevas normas que los vascos podrán aplicar en breve a la hora de hacer testamento destacan sobre cualquier otro aspecto.
En este terreno las novedades más importantes de la Ley son la reducción de la legítima de los descendientes a un tercio de los bienes del testador y la supresión de la legítima de los ascendientes. Pero el texto también ofrece otras opciones interesantes como la posibilidad de pactar con los herederos un reparto en vida (pactos sucesorios), el testamento por comisario, proporcionar una posición preeminente y mayor protección al cónyuge viudo o al miembro sobreviviente de las parejas de hecho y poder asumir una herencia que acarree deudas sabiendo que la responsabilidad del heredero queda limitada al valor de los bienes recibidos.
No se puede afirmar que la nueva Ley establezca en Euskadi una situación de libertad total para testar, porque persisten algunas limitaciones “razonadas”, pero Andrés Urrutia y Txemi Gorostiza apuntan que en Ayala y en Nafarroa existe libertad absoluta y que es una opción que está en el horizonte del legislador. Insisten también en que la nueva norma no te obliga a nada, sino que “te da más opciones”. “¿Está la sociedad vasca preparada desde el punto de vista sociológico para la libertad de testar? Hay quien entiende que sí, pero la propuesta que hicimos desde la Academia Vasca de Derecho junto con los colegios profesionales de abogados y notarios fue moderada. Probablemente la sociedad nos arrollará y demandará más libertad para sus disposiciones sucesorias, pero con esta Ley estamos en la mejor de las situaciones para atender esa demanda social”, explica Andrés Urrutia para quien pasar de una legítima de dos tercios o de cuatro quintos a una ausencia de legítima era “un doble salto mortal”.
Los expertos indican que la supresión de limitaciones para los testamentos y otras medidas contenidas en la Ley se han incluido atendiendo a los planteamientos más habituales de los ciudadanos y a la vista de las situaciones cotidianas y opinan que la legítima del cónyuge viudo “no la cuestiona nadie”, mientras que la de los hijos y descendientes plantea más problemas y la de los ascendientes “estaba absolutamente puesta en cuestión”.
Ante un previsible aumento de las consultas a abogados y notarios, Borja Iriarte, Txemi Gorostiza, Mario Martínez de Butrón y Andrés Urrutia transmiten un mensaje de tranquilidad y aseguran que con la entrada en vigor de la nueva Ley los testamentos otorgados hasta ahora “son perfectamente válidos” y que “nadie ha perdido derechos”. “La gente no debe pensar que los testamentos que tiene hechos no valen, son válidos, lo que pasa es que con la nueva norma, si quieren, se pueden ampliar, mejorar, se pueden dar más facultades al cónyuge viudo... Como la Ley da más libertad, quien quiera hacer una cosa distinta ahora podrá hacerla, pero lo hecho vale perfectamente”, insiste el decano del Colegio Notarial.
Otra previsible consecuencia de la aplicación de la Ley de Derecho Civil Vasco es que “en el Tribunal Supremo habrá menos temas de ciudadanos vizcaínos, porque ya no habrá vascos sometidos al Código Civil”, puntualiza el magistrado Borja Iriarte. - B. Sotillo
Vecindad civil. La Ley establece la vecindad civil vasca para su aplicación a todos los vascos, eliminando las diferencias territoriales.
Libertad. Otorga mayor libertad a la hora de testar, aunque se mantienen algunas limitaciones (como la legítima y la troncalidad) pero más restringidas.
Matrimonio. La Ley también regula el régimen de bienes en el matrimonio y parejas de hecho y establece un sistema de libre elección, así como un régimen supletorio.
El Parlamento Vasco aprobó la Ley de Derecho Civil Vasco el pasado 25 de junio, el 3 de julio se publicó en el BOPV y entrará en vigor dentro de tres meses. El camino se inició hace 10 años con la presentación de una proposición de ley.