BARCELONA. El pequeño ingresó hace 13 días, tras confirmarse que sufría la enfermedad, de la que no estaba vacunado y de la que no se producía ningún caso en España desde 1987.
Los sanitarios están a la espera de la respuesta del niño al tratamiento, una medicación antitoxinas que ha tenido que importarse de Rusia debido a que ningún país europeo contaba con reservas.