MADRID/PLASENCIA. El encuentro se ha producido después de que Lejárraga --católico practicante-- enviara una misiva al Papa en la que le contaba el rechazo que sufrió en su localidad natal, Plasencia (Extremadura), a la que regresó tras someterse a una operación de cirujía con la que cambió de sexo, según ha adelantado el diario 'Hoy' de Extremadura.
Diego Neria Lejárraga nació hace 48 años en Plasencia pero siempre se sintió varón, según detalla el diario. A los 40 años, después de una vida llena de contradicciones en la que siempre contó con el apoyo de su familia, contactó con una cirujana plástica y, poco a poco, comenzó a cambiar su cuerpo, por lo que se trasladó a Madrid.
Cuando regresó a Plasencia, su aspecto físico ya había cambiado pero se encontró con el rechazo de mucha gente de su entorno. Neria se encerraba en casa a llorar y fue en ese momento cuando se decidió a escribir al Papa, según el diario.
Tras recibir su carta, Francisco le telefoneó a finales del año pasado, en concreto, el Día de la Inmaculada, y le dijo que su misiva "le había llegado al alma". Posteriormente, volvió a ponerse en contacto con él, poco antes de Navidad, para fijar la fecha del 24 de enero con el fin de mantener un encuentro en el Vaticano.
Lejárraga ha asistido al encuentro con el Pontífice acompañado de su mujer en una reunión privada que tuvo lugar el pasado sábado, a las cinco de la tarde. Durante la misma, preguntó al Santo Padre "si había lugar" para él en la casa de Dios, a lo que Francisco le abrazó, según revela el diario 'Hoy'. "Si yo hubiera podido elegir, no habría elegido mi vida", añade.