WASHINGTON. Fue el "viernes negro" con más verificaciones de antecedentes de la historia, ya que la cifra de 175.000 es tres veces superior al promedio diario procesado por el Buró Federal de Investigaciones (FBI).

El "viernes negro", que da inicio a las rebajas de la temporada navideña, suele ser uno de los días del año en que más armas de fuego se adquieren y para llevar a cabo la transacción normalmente se requiere una verificación de los antecedentes penales del comprador.

Por ley, el FBI debe revisar los antecedentes penales de una persona que quiere adquirir un arma en tres días hábiles y, si da el visto bueno, la finalización de la compra depende únicamente de la decisión del vendedor.

Durante todo noviembre, el FBI procesó más de 1,8 millones de controles de antecedentes, un 12 % más que en octubre.

Pese al récord del reciente "viernes negro", el día con mayor número de verificaciones de antecedentes desde que hay registros fue el 21 de diciembre de 2012, con más de 177.000.

Ese auge se produjo por el miedo a que se implementaran mayores controles a la compra de armas tras la masacre ocurrida una semana antes en la escuela Sandy Hook de Newtown (Connecticut), donde fueron asesinados a tiros 20 niños y 6 mujeres.

Esa matanza y la ocurrida unos meses antes en un cine de Aurora (Colorado), donde murieron 12 personas y otras 58 resultaron heridas, reabrieron con fuerza el debate sobre el control y la posesión de armas en Estados Unidos.

El presidente de EEUU, Barack Obama, impulsó a raíz de esas matanzas medidas para reformar la legislación al respecto, pero el Congreso no aprobó siquiera la que generaba más consenso: una mejora del sistema de verificación de antecedentes para impedir que las armas lleguen a los criminales o a personas con problemas mentales.

En junio pasado, tras un tiroteo en una escuela secundaria de Oregón, Obama sostuvo que su "mayor frustración" como mandatario ha sido el fracaso en su intento de endurecer las leyes de control de armas a nivel nacional.

Los votantes de Washington (oeste) aprobaron aumentar el control sobre las compras de armas de fuego en el estado en un referendo celebrado el pasado 4 de noviembre, dos semanas después de un tiroteo en un instituto de la localidad de Marysville en el que murieron cuatro jóvenes y el atacante, que se suicidó.