Burgos - Un cortocircuito se baraja como la posible causa del devastador incendio que ha destruido la planta de la industria cárnica de Campofrío en Burgos, ubicada en el Polígono Industrial de Villafría y una de las más grandes existentes en la Comunidad castellana. El fuego no causó víctimas, pero sí motivó el desalojo de unos 400 vecinos de zonas próximas a la factoría y tiene en vilo a miles de familias, las de los empleados de la firma cárnica y las industrias auxiliares, que temen por sus puestos de trabajo después de que la planta haya quedado totalmente destruida.
El fuego se originó a las 06.40 horas en la zona de cocidos, sin que hubiera que lamentar trabajadores heridos relacionados directamente con el grave siniestro, que en poco tiempo provocó una densa humareda y que obligó a intervenir a los Bomberos de Burgos y del Aeropuerto de Villafría. Los bomberos alertaron de la magnitud del incendio, de la imposibilidad de controlarlo y de sus posibles consecuencias, debido a la presencia de material inflamable. Durante unas cuantas horas, mientras las llamas se apoderaban del enorme pabellón y el humo oscurecía el cielo, se temió que se produjera una explosión o emanaciones tóxicas si el fuego alcanzaba los depósitos de amoníaco. Según informaron medios locales, en el momento en el que se desencadenó el incendio se encontraban trabajando en la planta unos 200 empleados que fueron rápidamente evacuados.
400 vecinos Unos 400 vecinos de los barrios burgaleses de Villafría y Cotar, próximos a la planta, tuvieron que ser evacuados de sus viviendas por la elevada densidad de humo y el riesgo de que contenga elementos tóxicos, según informó el alcalde de Burgos, Javier Lacalle. La mayor parte de estas personas pudo alojarse en viviendas de familiares o amigos, aunque 140 fueron instalados provisionalmente en dependencias municipales, concretamente en un polideportivo y un centro cívico. El alcalde advirtió del riesgo de que fuera necesario desalojar a los vecinos de alguna otra zona de la ciudad si se agravaba la situación o cambiaba el sentido del viento.
El Ayuntamiento de la capital burgalesa también activó el Plan Municipal de Emergencias y cortó al tráfico la ronda Burgos BU-30. El presidente del comité de empresa de Campofrío, Pablo Fraile, aseguró ayer que el incendio de la planta principal de Campofrío es “un drama para mil familias”. Adelantó que pedirán a todas las administraciones que se impliquen para volver a poner en marcha la planta, porque “muchas familias dependen de ella”.
El presidente del comité reconoció que los bomberos han dado la planta principal por perdida porque las instalaciones están completamente destrozadas.
Recuperar la planta Por su parte, la dirección de Campofrío se compromete a “invertir en Burgos para recuperar la capacidad productiva lo antes posible”, según aseguró ayer la multinacional. Aunque todavía no han tenido tiempo de realizar una valoración de daños, los responsables de la compañía afirmaron que su prioridad es “preservar la seguridad de las personas y colaborar con los servicios de emergencia”.
Campofrío Food Group, que es la actual denominación de la multinacional, emitió una nota en la que envió un mensaje de “tranquilidad a sus empleados, clientes, proveedores y consumidores”, al tiempo que agradeció el apoyo y la solidaridad recibida del Ayuntamiento de Burgos, la Junta de Castilla y León, la Delegación de Gobierno y otras instituciones y ciudadanos burgaleses.
Los responsables de la multinacional del sector de la alimentación se mostraron conscientes de los daños que este siniestro tiene sobre la actividad de la empresa y aseguraron que la compañía toma “las medidas necesarias para garantizar el suministro de sus productos al mercado a través de sus otras fábricas, tanto en España como en otros países del grupo”. - Efe/E.P.