España refuerza su presencial policial en la valla para frenar la presión migratoria

Madrid - El Ministerio del Interior reforzó ayer con 475 agentes más el número de efectivos de la Policía Nacional y de la Guardia Civil en Ceuta, Melilla y Algeciras (Cádiz), tras la oleada de inmigrantes de los últimos días, a la vez que agilizará los procedimientos de devolución en caliente de las personas recién llegadas. Estas medidas fueron adoptadas tras una reunión para analizar la presión migratoria que ha estado presidida por el ministro, Jorge Fernández Díaz, y a la que han acudido el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, y lo directores de la Policía y la Guardia Civil, entre otros altos mandos.

El encuentro se produjo después de que desde el pasado día 4 hayan llegado a las costas españolas o hayan sido rescatados por Salvamento Marítimo y la Guardia Civil 1.388 inmigrantes procedentes del norte de África, la mayoría de ellos (1.246) en aguas del Estrecho. A la vez se han producido varios intentos de asalto a las vallas de Ceuta y Melilla. El más importante este pasado martes en Melilla, donde unos 750 inmigrantes trataron de cruzar la valla en varios asaltos, aunque solo lo lograron 80.

El Ministerio del Interior resaltó, por su parte, los “estrechos contactos” que mantiene estos días con las autoridades marroquíes “para buscar la solución más rápida posible para resolver la situación creada” por la oleada de inmigrantes. “A día de hoy las fuerzas marroquíes continúan colaborando en el rescate de inmigrantes en las aguas del Estrecho de Gibraltar, así como en el control de movimientos irregulares en las inmediaciones de las fronteras de Ceuta y Melilla”, subrayaron fuentes del Ministerio.

Precisamente ayer, el ministro marroquí del Interior, Mohamed Hasad, reconocía que la llegada masiva de inmigrantes irregulares a las costas españolas desde Marruecos se ha debido a “disfunciones que han podido suceder”. Unas disfunciones que no ha precisado pero que “serán corregidas muy rápido”, según dijo a los medios de comunicación locales Hasad, quien aseguró estar en contacto “regular” con su homólogo español.

Este pasado martes, fuentes cercanas a la Policía y también de una ONG denunciaban la ausencia de vigilancia policial en las costas marroquíes del Estrecho. Según esas fuentes, los agentes de la Gendarmería Real y las Fuerzas Auxiliares estaban concentradas en Tánger y Tetuán, pero ausentes de las costas del Estrecho.

Esta circunstancia, agregaban desde una ONG que opera en Tánger, provocó que “los inmigrantes estén saliendo al mar como quien va de excursión”. Nada de salidas clandestinas. La gente empezó a correr la voz de que no había control, de que podían pasar de cualquier manera”, describía una de las integrantes de este colectivo.

Otra de las medidas adoptadas por Interior ha sido la puesta en marcha en Algeciras de un centro provisional para la atención a los inmigrantes, así como agilizar los procedimientos de repatriación. A primera hora de la tarde de ayer se habían materializado ya 250 expedientes de devolución en caliente por parte de la Subdelegación del Gobierno en Cádiz, según precisó Interior. También se han establecido contactos con los órganos judiciales para la centralización de estos expedientes en un Juzgado de Tarifa, con el objetivo de agilizar los trámites.

A Madrid y Barcelona Algunos inmigrantes de los que han llegado esta semana a las costas españolas o han sido rescatados, están siendo trasladados desde Algeciras y Tarifa a los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Madrid y Barcelona. Fuentes de la Unión Federal de Policía (UFP) manifestaron que ayer a la tarde, al menos 35 habían salido ya a mediodía hacia Málaga en autobús para después ser trasladados en avión hasta Madrid y Barcelona.

Por su parte, otras fuentes policiales explicaron que la comisión judicial que tiene que decidir si los repatria, los pone en libertad o los envía a un CIE ha optado por esta última alternativa para 200 inmigrantes, que se irán repartiendo en esos centros en función de la disponibilidad.

Para proceder a la repatriación es necesario que España tenga firmado un convenio en ese sentido con el país correspondiente, pero muchos de los inmigrantes que llegan a España vienen indocumentados, por lo que se desconoce su nacionalidad. Fuentes de la UFP agregaron que unos 200 inmigrantes que ya llevaban un tiempo en el CIE de Algeciras y su anexo de Tarifa y que no pertenecen a la oleada de esta semana, han salido de estos centros, por lo que de momento cuentan con plazas.

Por último, fuentes de la Comisión Europea (CE) indicaron ayer que no se ha recibido de momento ninguna petición de ayuda por parte de España tras esta oleada de inmigrantes de origen subsahariano llegados en los últimos días a Ceuta, Melilla y Algeciras. La CE ya ha concedido a España 10 millones de euros de los fondos de emergencia para mejorar las fronteras en Ceuta y Melilla y, de este modo, hacer frente a la presión migratoria, recordaron las mismas fuentes comunitarias. - Efe

España localiza una patera. La masiva llegada de inmigrantes del lunes y el martes a las costas de Tarifa dio paso ayer a un único rescate con diez personas a bordo, en contraste con el martes, cuando fueron interceptadas 94 embarcaciones con 920 inmigrantes.

Doce embarcaciones. Las autoridades marroquíes rescataron y trasladaron a Marruecos a 99 inmigrantes que viajaban en doce pateras localizadas en aguas del Estrecho de Gibraltar.

Alrededor de las 05.00 horas de la madrugada de ayer miércoles, un grupo de unos 600 subsaharianos protagonizó un intento de entrada a la carrera por la zona conocida como Villa Pilar. A falta de datos oficiales, seis habrían conseguido acceder a la ciudad y otros 80 se quedaron subidos en la valla de Melilla, de los que unos 15 permanecían, al cierre de esta edición, encaramados a 6 metros de altura.

Un grupo de otras 30 persona lo intentó, sobre las 06.00 horas, por el puesto fronterizo de Beni Enzar.