Idoia Alonso

vitoria - Cómo escoger la mejor combinación de metro para llegar a un punto de la ciudad, manejar el mando a distancia del aire acondicionado de un hotel o un aspirador, saber elegir la opción más barata entre un abono de transporte combinado... El alumnado vasco de 15 años sabe solucionar estos problemas cotidianos como la mayoría de los estudiantes de la OCDE, según el informe PISA que, además de evaluar las competencias tradicionales (matemáticas, lectura y ciencias), en su última edición ha medido la capacidad 85.000 estudiantes de 44 países para comprender y resolver situaciones en las que la solución no es obvia.

Los estudiantes vascos han sacado en la prueba 496 puntos, 19 puntos por encima de España que vuelve a situarse en la cola de los países desarrollados, esta vez, a la hora de demostrar sus habilidades prácticas (ocupa el puesto 31 de 44 países). PISA constata la existencia de ciertas dificultades a la hora de aportar soluciones creativas a problemas que pueden surgir en la vida diaria porque los resultados vascos están cuatro puntos por debajo de la media de la OCDE (500) y tres puntos por debajo que en 2003. El informe señala que no se trata de una diferencia "estadísticamente significativa", igual que respecto a Catalunya y Madrid que también participaron en la evaluación con una muestra ampliada.

Según la escala de 1 a 6 de dificultad que establece PISA, Euskadi se sitúa en el nivel 3, como la mayoría de los estudiantes de los países de la OCDE (el 56,6%). Una de las pocas excepciones en la edición de 2012 es España, al situarse un peldaño por debajo de lo que se podría considerar como normal. Según el informe PISA, el nivel 2 puede considerarse como el "nivel básico de aptitud", es decir, representa la competencia mínima requerida en el mundo de hoy. Los estudiantes españoles han demostrado que son capaces de abordar situaciones fuera del ámbito familiar, pero necesitan orientación para dar con la solución.

Durante la presentación de estos resultados, la secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio, explicó que la media de los estudiantes españoles serían capaces de interpretar en un mapa de carretera la ruta más corta o comprar el billete más barato (combinado metro, autobús y tren) en una ciudad desconocida, pero no si surgieran complicaciones como perder uno de los transportes o tener que pagar una penalización. Tampoco serían capaces de entender y programar aparatos electrónicos complejos aunque tan cotidianos como un mp3 o un robot aspiradora. Lo más preocupante en el caso español es que uno de cada cuatro alumnos de 15 años no alcanza siquiera ese nivel.

Tras confirmar la mediocridad de los resultados obtenidos por España, la número dos del Ministerio de Educación defendió la necesidad de implantar la Lomce para promover "un cambio pedagógico radical" en la docencia, que tiene que ver con el liderazgo de las direcciones. Preguntada por si este bajo nivel es responsabilidad del profesorado, Gomendio dijo que "son el eslabón más importante". Asimismo, incidió en que la reforma educativa del Gobierno del PP dejará atrás la memorización de un libro de texto para pasar a barajar distintas fuentes y saber seleccionarlas. "Los profesores van a tener que saber solucionar tareas complejas, ser innovadores y creativos", indicó Gomendio, para añadir que "la responsabilidad última de poner en práctica (estas competencias) es de ellos".

En respuesta a estas declaraciones, diversos sindicatos docentes aseguraron que hasta que no cesen los recortes en educación, que han provocado el aumento de alumnos por clase, el número de horas que imparten o la no sustitución de los profesores de baja, difícilmente se conseguirá innovar en los métodos pedagógicos.

En la media de la OCDE El Departamento de Educación del Gobierno vasco está aún analizando los pormenores del informe presentado ayer y que no difieren casi nada respecto a 2003. Los escolares fueron sometidos a un test por ordenador en el que debían resolver problemas sacados de situaciones diarias a fin de medir las aptitudes que emplearían ante dificultades reales. Entre las pruebas tuvieron, por ejemplo, que programar un termostato o descubrir la ruta más rápida para alcanzar un destino.

Los 496 puntos sitúan al alumnado vasco a la par de los estudiantes de 15 años de Portugal, Suecia, Catalunya, Dinamarca o Irlanda, pero a distancia de los países que lideran este ranking educativo que cada tres años realiza la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Los estudiantes de Singapur y Corea del Sur volvieron a aprender con mayor rapidez y resolvieron mejor los problemas en contextos con los que no están familiarizados.

Con 507 puntos, Madrid es la única de las tres comunidades autónomas que pidieron participar en PISA con una muestra ampliada que superó la media de la OCDE. No obstante, los datos hechos públicos por el Ministerio de Educación dan a Madrid un margen de error de 13 puntos (cuando a Euskadi le otorga un margen de error de +/- 3), lo cual podría significar que Madrid podría estar por debajo de Euskadi. Pero más allá de esta anomalía, las y los estudiantes vascos, madrileños y catalanes han demostrado una destreza muy superior a la de la media en España y al nivel de medio de la OCDE. El informe señala que los estudiantes que alcanzan el nivel 3 de la escala son más autosuficientes en la resolución de problemas.

Las Preguntas de PISA 2012