BILBAO. Estos datos han sido aportados hoy por el Departamento, en un acto con motivo del Día Meteorológico Mundial, al que ha acudido la consejera del área, Estefanía Beltrán de Heredia.
Los nueve temporales registrados en esos dos meses provocaron la activación de siete alertas naranjas y de dos rojas, las que se ponen en marcha en situación de mayor riesgo para la población.
Como ejemplo de la magnitud de los últimos temporales, que han tenido especial incidencia en la costa, el Departamento ha explicado que mientras que en los últimos 12 años solamente en tres ocasiones (2007, 2008 y 2009) el oleaje superó los 10 metros de altura, durante este año se han sobrepasado estos valores en tres ocasiones.
El valor máximo medido fue de 11,1 metros de altura de ola registrado en la boya de San Sebastián el pasado 4 de marzo.
Sin embargo, a pesar de lo llamativo de la frecuencia de los temporales, el Departamento considera que en ningún caso se puede hablar de un oleaje excepcional, ya que el impacto en costa no se ha debido sólo a la altura del oleaje, sino a la coincidencia de los temporales con mareas vivas.
Así, tanto el elevado número de temporales como la coincidencia de dos de ellos con las mareas vivas ha sido lo ha provocado la activación de dos alarmas rojas.