BILBAO. El Departamento vasco de Salud garantizará el derecho a la sanidad pública a los ciudadanos de Euskadi que hayan residido más de tres meses en el extranjero y que retornen a la Comunidad Autónoma o continúen empadronados en el País Vasco, según ha asegurado el consejero vasco del ramo, Jon Darpón. "Continuaremos atendiendo a todas las personas que salgan al extranjero por un periodo de uno, dos o 33 meses, y vuelvan", ha asegurado.

El Consejero vasco se ha manifestado, de esta manera, durante una rueda de prensa en Bilbao para presentar el Plan de Salud 2013-2020 del Gobierno vasco, y en respuesta a las disposiciones de acompañamiento de los presupuestos generales del Estado que entraron en vigor el pasado día 1, que establecen que las personas que hayan agotado la prestación o el subsidio por desempleo perderán el derecho a la asistencia sanitaria si dejan de residir en España.

Según las nuevas disposiciones, la ley considerará que ya no residen en España aquellas personas que pasen más de 90 días fuera del país en un año natural.

A este respecto, Darpón ha recordado que esta modificación "no ha sido consultada ni comunicada" a las correspondientes comunidades, algo que el consejero ha considerado "impropio" ya que se trata de una competencia que corresponde al Gobierno vasco. "Es una descortesía absoluta", ha criticado.

En cualquier caso, ha asegurado que la sanidad vasca "continuará atendiendo a todas las personas que salgan al extranjero por un periodo de uno, dos o 33 meses, y vuelvan".

Además, ha advertido de que el Instituto Nacional de Salud "no es capaz, en este momento, de saber quién está dentro o fuera del Estado", con lo cual, ha agregado, se trata de una medida "difícilmente cumplible". "Aunque lo lograra, nosotros tenemos la firma voluntad de mantener la asistencia sanitaria a los grupos a los que atendemos", ha subrayado.

UNIVERSALIDAD "GARANTIZADA"

Darpón ha señalado que el Gobierno vasco "siempre ha defendido la universalidad" de la asistencia sanitaria y "seguirá defendiéndola". En este sentido, ha afirmado que "todas las personas" tienen acceso a la tarjeta sanitaria, de acuerdo al decreto 14/2012 del Gobierno socialista, que ha sido "complementado" por el Ejecutivo autonómico "situando un médico de familia a todas las personas que cuentan con menos de un año de empadronamiento" en la Comunidad Autónoma Vasca.

Además, ha asegurado que el médico "no es capaz de determinar, por el procedimiento habitual, si un paciente le corresponde en su cupo por un motivo u otro". En cualquier caso, se ha mostrado convencido de que la asistencia "está garantizada" y ha advertido de que al Departamento de Salud "no le consta" que haya personas que, por motivo de su empadronamiento, tengan "problemas" a la hora de acceder al Sistema Vasco de Salud.