madrid. La violencia machista arrebató en 2013 la vida a 48 mujeres y cinco niños, víctimas de esta forma del maltrato en el hogar que, además, dejó huérfanos a otros 42 menores hijos de las mujeres muertas a manos de sus parejas.

Es el frío balance anual de esta lacra, que no obstante ofrece en 2013 el número más bajo de mujeres muertas de los últimos diez años, cuando se comenzaron a contabilizar estos crímenes. La cifra puede sin embargo cambiar e igualarse a la del año 2012 si se confirma que las cuatro muertes que todavía están en investigación -en Verín (Ourense), Castrillón (Asturias), Vegalatrave (Zamora) y Zaragoza- son consecuencia de la violencia de género.

La última de las 48 víctimas contabilizadas fue María Isabel, una mujer de 45 años, asesinada en Marín (Pontevedra) el día después de Navidad. Su presunto asesino, su compañero sentimental, tenía antecedentes por violencia de género en una relación anterior, pero no constan denuncias por parte de la fallecida.

De las 48 víctimas mortales, una era menor de 16 años; otra tenía entre 18 y 20 años; once, entre 21 y 30 años; diecisiete, entre 31 y 40 años; nueve, entre 41 y 50 años; tres, entre 51 y 64 años, y seis eran mayores de 64. Diez residían en Andalucía; nueve en Madrid; ocho en la Comunidad Valenciana; cuatro en Castilla-La Mancha; cuatro en Catalunya; dos en Castilla y León, las mismas que en Cantabria, Canarias y Baleares y Galicia. En Aragón, Extremadura y País Vasco se ha contabilizado una víctima en cada comunidad.

Según la estadística del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, solo diez del total de las asesinadas en este año (21,3%) habían denunciado a sus agresores por malos tratos, y de ellas siete obtuvieron medidas de protección (14,9%). Veintiuna de las asesinadas (el 44,6%) habían terminado la relación sentimental con su agresor o estaban en fase de ruptura, mientras que 27 (el 55,3%) seguían manteniendo un vínculo con él.

Pero a esta estadística hay que sumar la de los cinco niños asesinados por sus padres con el único objetivo de infligir mayor daño a la madre. Todos ellos eran españoles y tres de ellos tenían entre 5 y 6 años, otro entre 9 y 10, y el más mayor entre 13 y 14 años. El ambiente familiar pautado por la violencia además ha dejado a 42 menores huérfanos. Son datos que, según aseguran desde el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, obligan a seguir trabajando frente a este fenómeno y recuerdan que pueden denunciar su situación en el teléfono 016 al que siguen recurriendo muchas mujeres.

Las llamadas a este número de información y asesoramiento jurídico a las víctimas de violencia de género, que no deja rastro en la factura, sumaron 5.490 en noviembre, lo que supuso un 43,7% más que en el mismo mes del año anterior, cuando se registraron 3.820.

Ese aumento de llamadas, según señalaron fuentes del ministerio, es "una buena noticia" porque es síntoma de que las mujeres maltratadas usan este recurso como primer paso para salir de la violencia. Desde que comenzó el año, este teléfono ha recibido un total de 51.870 llamadas.

en riesgo Según los datos actualizados hasta el pasado 30 de noviembre del Ministerio del Interior, 16.086 mujeres maltratadas se encuentran en una situación de riesgo -bajo, medio, alto o extremo-, de las que 156 tienen entre 14 y 17 años.