Santiago de Compostela. El movimiento ciudadano Nunca Máis volvió ayer a las calles y plazas de diversas localidades gallegas para clamar contra "la impunidad" de la sentencia del Prestige en la que no ha habido ningún condenado por delito contra el medio ambiente.
Bajo lema Non esquecemos. Non á impunidade. Mareas negras Nunca Máis, las siete ciudades gallegas y diversas cabeceras de comarca acogieron concentraciones en las que miles de asistentes coreaban al unísono: "Mareas negras, nunca máis" o "Impunidade, nunca máis".
Asimismo, algunos de los presentes portaban carteles en los que se podía leer Culpables sobre los rostros de dirigentes del Partido Popular durante la catástrofe como José María Aznar, Mariano Rajoy o Francisco Alvarez-Cascos.
En todas ellas, se leyó el mismo manifiesto en el que se avisó de que Nunca Máis "volverá a las calles" y a movilizarse para mostrar su indignación con el fin de pedir que se haga Justicia por el desastre medioambiental en las costas gallegas.
En la compostelana Plaza del Toural, donde se concentraron más de mil personas, Federico Pérez aludió a la "indignación ciudadana" y se preguntó "dónde está la justicia" para añadir que quizás, en pleno siglo XXI, "solo nos quede la justicia por la mano" a la que se refería la poetisa Rosalía de Castro en sus versos.
En A Coruña, aproximadamente tres mil personas con pancartas y la bandera de Nunca Máis tomaron el Cantón Grande donde protestaron contra la sentencia del Prestige y gritaron que "los políticos siempre se libran" para preguntarse "quiénes son los culpables".
En Vigo, otras mil personas se concentraron ante el museo Marco, con una pancarta -Nunca Máis. Dignidade- y protagonizaron una pequeña manifestación por las principales avenidas, al son de los tambores y de una banda de gaitas.
En Ourense se juntaron varios cientos de personas y hubo una pequeña marcha que partió desde el parque de San Lázaro.
En Lugo, en la Praza da Soidade se congregaron también cientos de personas.
