Madrid. Los datos del segundo trimestres de 2013 del Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España (CJE) revelan que Castilla y León y Extremadura son las comunidades en las que los jóvenes de entre 16 y 29 años encuentran más dificultades para emanciparse, en contraste con Baleares y Cataluña, donde la población joven se independiza en mayor medida. El informe, que fue presentado ayer, recuerda que solo el 22% de la población menor de 30 años está emancipada, uno de cada cinco; un porcentaje que ha disminuido, ya que en 2008 se situaba entre el 25 y 26%.

Por debajo de la media nacional del 22%, se sitúan, además de Extremadura y Castilla y León, las comunidades de Asturias, Galicia, La Rioja, Murcia, Castilla-La Mancha, Andalucía, Cantabria y la CAV (18,3%), mientras que superan la media Baleares, Cataluña, Aragón, Madrid, Navarra (24%), Valencia y Canarias. La edad de abandono del hogar familiar se ha retrasado con los años, de forma que la mayor parte de los jóvenes emancipados tiene entre 30 y 34 años. Baleares es la única comunidad autónoma en la que la tasa de emancipación de 16 a 24 años supera el 10% porque en el resto, más de nueve de cada diez menores de 25 años todavía vive con su familia.

Larga duración Por otra parte, el número de jóvenes de entre 25 y 29 años que se encuentran sin empleo desde hace dos años o más ha aumentado un 335% desde el segundo trimestre de 2008 hasta el mismo periodo de 2013, según el informe del CJE. Así, mientras que la tasa de parados de larga duración de entre 16 y 24 años en España era menor al 5% en el segundo trimestre de 2008, en el segundo trimestre de 2013 casi alcanza el 25%. De forma paralela, las personas de entre 25 y 29 años tenían una tasa de paro de larga duración ligeramente mayor al 6% en el segundo trimestre de 2008 y en el mismo periodo de este año ha alcanzado el 30%.

Por último, el colectivo de personas de entre 30 y 34 años han pasado de tener una tasa de paro de larga duración de cerca del 6% en el segundo trimestre de 2008 a un índice del 30%. El presidente del CJE, Ricardo Ibarra, advirtió ayer de la situación "cada vez más alarmante" de los jóvenes en España por la "baja calidad de empleo" a que tienen acceso, por ver "como aumenta la precariedad" y, según indicó, por "la falta de medidas del ejecutivo". En este sentido, destacó que el 93,5% de los contratos laborales realizados a jóvenes de hasta 29 años fueron contratos temporales y advirtió de la disminución de las horas de empleo y de los contratos a jornada completa en favor de trabajos a tiempo parcial, con una remuneración menor.

Según relató el autor del informe en rueda de prensa, Joffre López, el salario medio anual neto de los jóvenes que tienen entre 16 y 29 años es de 13.650 euros; y el de los que tienen entre 30 y 34 años es de 16.800 euros. Además, aseguró que el aumento de la población inactiva se debe principalmente a que algunos jóvenes han "desistido" de encontrar un empleo y están dedicados a otras tareas (38,8%) y a que otros (42,4%) están ampliando sus estudios.