vitoria. San Juan parte de la base de que se trata de un crimen lleno de incógnitas. "Es que los detenidos son, en principio, dos personas normalizadas, adaptadas, con un nivel de instrucción alto y sin problemas de inestabilidad emocional de relevancia clínica, por lo que es un caso que desde el punto de vista de la psicología criminal es muy extraño y genera gran incertidumbre".

¿Qué le llama más la atención?

Como psicólogo criminalista, hay cosas que me dejan estupefacto. Lo que es el móvil, el modus operandi, todo lo que está relacionado con un crimen, entra dentro de los cánones normales de un asesinato. Todo se puede explicar desde la criminología. El elemento clave en este asunto, el quid de la cuestión, es qué lleva a unos padres a matar a una hija. Siempre, por supuesto, en el caso de que se demuestren que están implicados los progenitores. Esa es la única pregunta que queda sin respuesta en este momento y esa es la pregunta que a mí, como especialista y como ciudadano, me gustaría poder responder.

Es algo totalmente antinatural.

Sí, es antinatural que una madre, si ese es el caso, asesine a una hija. Cuando se explique eso, todo lo demás, se entenderá muy fácil.

Dicen ustedes, los expertos, que es difícil que unos padres se pongan de acuerdo para matar a un hijo.

Efectivamente. Siempre que se comete un infanticidio, en la inmensa mayoría de los casos, cuando no tienes ninguna otra línea de investigación alternativa, hay que empezar por los más cercanos. Por eso, tampoco en este caso, era descabellado pensar que los culpables se situaban en el entorno familiar. Lo que puede responder a la lógica es que el padre o la madre, solo uno de ellos, fuera el cerebro de la operación, que lo hubiese planeado uno de los dos. Y que la otra persona, por el vínculo marital o por una relación de sumisión o de dependencia -es siempre una hipótesis-, haya acabado encubriendo y colaborando con el crimen. Sin embargo, no responde a ninguna lógica que los dos se hayan puesto de acuerdo para asesinar a la niña.

¿Hay siempre detrás de un crimen de estas características un problema de falta de equilibrio o de estabilidad mental?

En Psicología Criminal solemos decir que cualquier persona es capaz de hacer cualquier cosa. Por aberrante que sea, un ser humano es capaz de hacer cualquier cosa. Pero si la pregunta es si se puede explicar desde la normalidad que un progenitor mate a su hijo, la respuesta es no. Forzosamente tiene que haber algún problema. Yo solo lo puedo explicar desde la psicopatología.

En otros supuestos...

En todos los demás supuestos, no. Hay muchas razones por las que una persona acaba asesinando a otra sin que esa persona sea inestable o sufra alguna patología clínica. Casi siempre se puede explicar desde la normalidad, pero esto no.

Después de un acto de este tipo ¿hay arrepentimiento?

No necesariamente. Pero la lógica dice que como son dos personas, tanto la madre como el padre -siempre que se demuestre que son los autores- integradas socialmente, con un nivel de instrucción alto, adaptadas a su medio, profesionales, cada uno de un ámbito, lo que responde a la lógica es que, con la presión de la investigación, acaben derrumbándose y terminen confesando. Es lo esperable. Mi presunción es que esto se acabe aclarando más pronto que tarde. Aunque a veces la naturaleza humana da sorpresas increíbles.

¿Se puede encontrar algún paralelismo con otros infanticidios, por ejemplo, el cometido por Bretón?

Son casos completamente distintos. El perfil de Bretón es claramente psicopático. Hay otros casos en los que puede producirse un momento de enajenación debido a una situación de estrés insoportable y que acabes ahogando a tus hijos en la bañera... Pero aquí hablamos de perfiles completamente diferentes. Son dos personas adaptadas, sin rasgos de personalidad antisocial, y aunque puede que la madre estuviera en tratamiento psicológico, eso no significa absolutamente nada. Hay muchas personas completamente socializadas y adaptadas que están en tratamiento. No debemos tener la visión de que el cliente del psicólogo es un ser inestable.