gasteiz. El dolmen de la Chabola de la Hechicera ha recuperado en parte la imagen que llegó a tener cuando se construyó. Ahora se pueden ver sus verdaderas dimensiones, aunque no su altura real, ya que la cámara tendría que estar cubierta por piedras, pero se ha dejado al aire con un objetivo didáctico y también turístico. La obra ahora se ha terminado, tres años después de que la anterior diputada de Cultura, Lorena López de la Calle, impulsara un programa de estudio y recuperación de este dolmen, del de la Huesera y el de Navaridas. El encargado de contextualizar el dolmen y contar el trabajo de restauración fue el profesor de la UPV Javier Fernández Eraso, quien explicó que estos monumentos "no es que fueran abandonados a su suerte, sino que pasaron a formar parte del paisaje".