vitoria. Técnico en Gestión Administrativo-financiera en el Ayuntamiento de Gordexola (Bizkaia), desde hace un año ha abandonado su plaza de funcionario para ocupar una concejalía del PNV en Artziniega, en sustitución de un compañero de partido que abandonó el cargo. Gómez abrirá hoy un ciclo de conferencias del Araba Buru Batzar que, dirigidas a alcaldes y concejales alaveses, lleva por título El Municipio: La Política de Cercanía y se celebra en Landaburu Etxea.
Euskadi sigue sin una Ley Municipal propia y ahora ha llegado este cambio normativo que quiere impulsarse desde Madrid. ¿Cómo analiza esta situación?
La Ley Municipal se ha planteado en los últimos años para una situación totalmente diferente a la que hay ahora. El anteproyecto que ha presentado el Gobierno central y que ahora está en fase de información da la vuelta a la estructura municipal de todo el Estado. Ahora, el asunto principal es ver cuál va a ser su alcance real, ver dónde termina y cómo se traslada después a Euskadi, que tiene su Concierto Económico y tres diputaciones con competencias propias. El fundamento último de este anteproyecto es la situación económica de los ayuntamientos. Y aquí, aparte de tener un sistema diferente, porque éstos no se nutren del Estado sino de las diputaciones, la situación económica es mejor.
¿Y eso en qué se puede traducir?
Lo más importante es la redefinición de las competencias de los Ayuntamientos, de los servicios que tienen que prestar y de cómo tienen que prestarlos, todo en términos económicos, teniendo en cuenta un coste estándar que se fije y sin atender en ningún momento ni a la autonomía de los municipios para decidir como tienen que prestar esos servicios ni a la calidad de éstos. Pero es que el nivel de vida en Euskadi es más alto que en el resto del Estado y, evidentemente, los municipios van a superar ese coste estándar simplemente porque los costes son mayores aquí.
Los municipios pequeños surgen como los más perjudicados.
Esta normativa lo que hace es fortalecer a las diputaciones. Frente a la posibilidad de establecer órganos intermedios, como las cuadrillas, la normativa lo que dice es: O municipios o diputaciones. Y el límite lo ponen los 20.000 habitantes. Si un municipio de menos población no es capaz de ofrecer servicios por debajo del coste estándar que se fije, deberán asumirlos la Diputación.
¿Y cómo puede influir esto en Álava, donde todos los ayuntamientos menos Vitoria son de menos de 20.000 habitantes?
Al fin y al cabo, podría influir en un vaciado de sus competencias. Los municipios pequeños también cumplen su función dentro del territorio, pero si nos vamos a la economía de escala ya sabemos que no van a poder competir a la hora de ofrecer esos servicios.
¿Por qué es tan importante tener una Ley Municipal en Euskadi, esa asignatura pendiente?
Porque va a suponer un reconocimiento de la mayoría de edad de los municipios. Es lo que falta por definir, sus competencias. Las de las diputaciones y el Gobierno ya están bien definidas, pero falta esta pata, no hay nada por debajo. Al fin y al cabo, supondría el cierre de la estructura institucional. Lo que ocurre es que ahora, con esta modificación normativa, vamos a partir de unas reglas de juego completamente distintas. Con un cambio tan importante, la ley deberá tener en cuenta otras cosas o recortar lo que se estaba pensando, esa autonomía que deberían tener los Ayuntamientos para ejercer sus competencias.