Vitoria. Desde que el pasado jueves 25 de abril reabrieran las fábricas de Toro y de Miranda de Ebro -que capitalizan la gestión del sector remolachero azucarero del norte del Estado-, las entregas de este tubérculo se han acelerado casi en la misma proporción que las siembras de la siguiente campaña. Cabe recordar que este producto sustenta una buena parte de la producción agrícola del sector primario alavés.

En relación con la fábrica de Miranda de Ebro, que es donde tributan los agricultores alaveses, después de una semana de funcionamiento se confirma el buen estado de la remolacha, con riquezas que superan los 17 grados y buena calidad industrial. De hecho, los responsables de la citada instalación fabril han recibido ya 33.000 toneladas de las 50.000 que se esperan en total. De ellas, los campos del territorio histórico tienen la exclusividad. Por ello ya están prácticamente todas cosechados. Las entregas, según confirma una fuente de la empresa, presentan un aspecto excelente sin ningún deterioro aparente a pesar del considerable retraso en el arranque y las adversidades climatológicas sufridas. El contenido en sacarosa de lo cosechado es muy similar al que había cuando paró la fábrica.

En lo que respecta a las siembras de la nueva campaña, el ritmo de trabajo en el campo, preparando el suelo y sembrando durante toda esta semana, está siendo excelente. La superficie final sembrada se puede acercar mucho a la de la pasada campaña, porque a pesar del retraso, se está haciendo una buena labor de siembra, y finalmente hay muchos agricultores que están optando por sembrar remolacha, por la conveniencia de diversificar cultivos, por su rentabilidad, y sobre todo teniendo en cuenta la caída del precio del maíz, que están señalando los principales indicadores de los mercados agrícolas. A ello se suma la prima prometida por Azucarera para incentivar la siembra.

Al respecto, cabe reseñar que la cita empresa ha decidido ayudar a los agricultores a paliar el retraso de las siembras a consecuencia de las persistentes lluvias con una ayuda de 275 euros por hectárea de remolacha que se siembre a partir de ya. La decisión se tomó hace unas semanas por parte de la Mesa Zonal de Seguimiento del Acuerdo Marco Interprofesional del Sector remolachero azucarero.