SEVILLA. Cuatro peritos en reconstrucción de accidentes de la Guardia Civil han dicho a la juez que el vehículo contrario circulaba a 50 kilómetros por hora, en unos cálculos corroborados por varios programas de reconstrucción de siniestros.
La quinta jornada del juicio ha comenzado con el rechazo, por parte de la juez, de la declaración como testigos del enfermero que sacó sangre al torero en el hospital y el celador que la trasladó al banco de sangre, como ha pedido hoy mismo la Fiscalía.
El fiscal basó su petición en que, tras la declaración el viernes del jefe de Hematología del hospital Virgen Macarena, había quedado en "una nebulosa" la custodia de las muestras que luego se usaron para la prueba de alcoholemia que arrojo un valor triple de lo autorizado.
La juez ha argumentado que la declaración del jefe clínico no supuso una "retractación ni revelación inesperada", como prevé la ley para introducir testigos en esta fase del juicio.